Los 100 días en el poder de Emmanuel Macron
El presidente de Francia Emmanuel Macron llegó a los primeros 100 días de su gobierno, lo cual suscita polémica sobre el balance un periodo considerado poco productivo. El propio Macron siempre rechazó el concepto de los cien días, convencido de que lo importante es la mirada a largo plazo y no las metas cortas. “Los últimos presidentes construyeron las condiciones de sus fracasos en las primeras semanas debido a la exageración, la negación de la realidad o la procrastinación”, afirmó en abril, antes de los comicios en primera vuelta. Mientras, una encuesta reveló que solo el 36 por ciento de los ciudadanos galos se declaran satisfechos con la gestión, quedando por debajo de su antecesor, François Hollande, quien terminó sus primeros tres meses con un 46 por ciento de satisfacción.
Uno de sus principales logros hasta el momento es la aprobación de la ley para acabar con las prácticas de nepotismo y garantizar una mayor transparencia en las cuentas de los parlamentarios. Macron quiso una ley que tuviera un efecto “ejemplarizante”, aplicable a su propio gabinete, el que él mismo conformó y tachó de personas “modelos”; sin embargo ese primer ejecutivo apenas le duró unas semanas. Cuatro ministros se vieron obligados a dimitir por sospechas de empleos ficticios y de nepotismo en su entorno.
Otro duro revés que sufrió el presidente fue la renuncia del jefe del Estado Mayor, el general Pierre de Villiers, por una disputa abierta como consecuencia de la decisión de Macron de recortar en 850 millones de euros el presupuesto militar este año.
En la esfera internacional, Macron ya se ha estrenado, y con éxito, en cumbres como la del G7 y G20. Y ha recibido en París tanto al presidente de los Estados Unidos Donald Trump, como al presidente ruso, Vladímir Putin.
Puertas adentro, los franceses no parecen ver ese proyecto a largo plazo que intenta vender su presidente. Solo un 23% considera que las cosas están mejorando en Francia, contra un 38% que cree que no ha cambiado nada y un 39% que afirma que todo va peor.
De cualquier modo, el palacio del Elíseo se esmera en destacar todo lo bueno que ha hecho su presidente en estos primeros 100 días, entre ello, la defensa del Acuerdo de París sobre el clima, la promesa de poner fin al estado de emergencia, la ley de confianza en la vida pública, la superación de las divisiones políticas y los recortes presupuestarios decretados en urgencia para lo que queda de año.
Pero aún así las razones del descontento de los franceses van desde la polémica reforma laboral que deberá ver la luz finalizando el verano, hasta el nuevo código laboral que no deja de ser criticado constantemente por los sindicatos, dispuestos incluso a movilizarse contra la norma. De igual manera, el 60 por ciento rechaza la propuesta del gobierno de reducir las ayudas a la vivienda. Otro paso en falso fue el del rol de la primera dama, al que prometió dotar de un estatus oficial contra el que se han revelado más de 311 mil personas por internet.
El presidente Macron y su esposa se encuentran de vacaciones en Marsella en estos momentos. Al regreso le esperan el proyecto de ley antiterrorista, la reforma laboral, la reelección de parte del Senado y la negociación de los presupuestos para 2018.
Emmanuel Jean-Michel Frédéric Macron nació en Amiens el 21 de diciembre de 1977. Desde el 14 de mayo de este año 2017 se convirtió en el vigesimoquinto presidente de Francia, copríncipe de Andorra y gran maestre de la Legión de Honor.
Es especialista en inversión bancaria y ejerció de asesor económico del presidente de la República François Hollande (2012). El 26 de agosto de 2014 fue nombrado ministro de Economía. En noviembre de 2016 anunció su candidatura para las elecciones presidenciales de Francia en abril de 2017. Obtuvo la victoria en la segunda vuelta, y con 39 años, se convierte en el presidente más joven de la historia francesa y el jefe de Estado francés más joven desde Napoleón Bonaparte.