Un nuevo gesto con el Chapecoense
El 28 de noviembre del 2016, todos los goles, todas las victorias y todos los cantos en el fútbol se apagaron, no sirvieron para nada. En aquella noche, LaMia Fligth 2933, operado por la Línea Aérea Mérida Internacional de Aviación, se estrelló en Medellín, Colombia, y murieron 71 de los 77 pasajeros a bordo, entre quienes se encontraban la plantilla del club brasileño Chapecoense, entrenadores del mismo y periodistas que cubrirían la final de la Copa Sudamericana entre el conjunto brasileño y los colombianos Atlético Nacional. Cuando todavía no ha pasado un año, decenas de homenajes y muestras de afecto ha recibido el conjunto carioca, la última de ellas en Barcelona, donde el club catalán sacó a sus mejores efectivos para honrar el nombre de los caídos.
El Chapecoense fue el invitado del Barca al tradicional trofeo Joan Gamper, un hermoso gesto de la entidad azulgrana, que, además, se presentó en el mismo con todas sus estrellas, sin reservar a un solo hombre para darle una notable relevancia al evento. Más allá de los cinco goles o el buen juego de los catalanes, dado sobre todo por la enorme brecha cualitativa entre los dos conjuntos, la noche de este 7 de agosto en el Camp Nou fue un lienzo de solidaridad y hermandad futbolística, un ejemplo que todo el que tenga la oportunidad debe imitar. En cambio, si algo no deseamos que se vea en ninguna otra plaza es la actitud de un grupo de aficionados que fueron al santuario del barcelonismo solo para gritar contra Neymar.
Al brasileño, que está en París por decisión propia y por la enorme incompetencia del club en el establecimiento de su cláusula de recisión, deben haberle picado los oídos, porque desde Gol Norte, uno de los sectores de las gradas del Camp Nou, se escuchó el triste “Aquí no te queremos, Neymar muérete”. Puede haber discrepancias e insatisfacciones con la partida del delantero, pero si un marco no era nada propicio para expresar semejante barbaridad era este duelo amistoso con el Chapecoense, club brasileño por demás, donde todos adulan a Neymar. Sin embargo, este detalle no empañó el partido gracias a la profesionalidad de las estrellas blaugranas, que salieron al pasto, regalaron un fútbol de alto calibre, pero no abusaron de un equipo que se ha tenido que armar, literalmente, de la nada tras la tragedia. Vinicius Eutrópio, el técnico del plantel visitante, agradeció al Barcelona por la invitación y dijo que han pasado momentos para valorar la vida y respetar a aquellos que ya no están.
El Chapecoense cuenta en la actualidad con 20 futbolistas cedidos de distintos conjuntos latinoamericanos, los cuales decidieron tener ese gesto para que la institución pudiera seguir compitiendo. En la nefasta noche del 28 noviembre, el club perdió a 19 jugadores y solo sobrevivieron tres, quienes se presentaron en el Camp Nou en el momento más emocionante de la noche. Hélio Neto, Jackson Follman y Alan Ruschel conmovieron a los pocos aficionados que asistieron al match, en particular el meta Follman, quien realizó el saque de honor con su pierna ortopédica tras sufrir serios daños en el accidente que forzaron la amputación de su pierna derecha. De ellos tres, Ruschel fue titular y disputó 36 minutos. A su salida, se arrodilló en el suelo y alzó sus brazos recordando a todos los que perecieron en el accidente aéreo. En honor a ellos, en honor a la verdadera esencia del fútbol y el deporte en sentido general, el Chapecoense merecerá por siempre un homenaje.
