Desde el corredor de la muerte, Dylann Roof despide a sus abogados
Dylann Roof, condenado a muerte por el asesinato de nueve personas hace dos años en una iglesia históricamente negra en Charleston, quiere que su equipo legal sea despedido debido a su origen étnico mientras busca que su condena y sentencia de muerte sean revocadas. Roof en una carta presentada ante la Corte de Apelaciones del Circuito americano, dice que sus abogados, debido a sus opiniones políticas, son obviamente sus enemigos políticos y biológicos. En junio de 2015, Dylann Roof accedió a la Iglesia Metodista de Emanuel, y cuando los presentes cerraron los ojos para orar, este aprovechó y les disparó.
Roof se declaró culpable de nueve cargos de asesinato, tres cargos de intento de asesinato y un cargo de posesión de armas, por la masacre en la Iglesia Episcopal Metodista Africana de Emanuel, que planeó durante meses. Un jurado federal lo condenó unánimemente a muerte en enero por cargos federales por crímenes de odio. Pero ahora Roff busca algo más, en una carta presentada ante la Corte de Apelaciones del Circuito americano, que quiere despedir a sus abogados, por declararles, enemigos biológicos y políticos. ¿Por qué?
Porque uno es judío y el otro es indio. Dylan Roof está peleando que le remuevan la pena de muerte y solo le den cadena perpetua, y para ello solicitó representarse él mismo. En la carta el asesino plantea que: "Mis dos abogados actualmente designados, Alexandra Yates y Sapna Mirchandani, son judíos e indios respectivamente. Por lo tanto, es literalmente imposible que ellos y yo podamos tener el mismo interés con mi caso”.
La nota manuscrita continúa diciendo que: "Debido a mis opiniones políticas, que son discutiblemente religiosas, me será imposible confiar en dos abogados que son mis enemigos políticos y biológicos". En la tarde del 17 de junio de 2015, los fieles dieron la bienvenida a Roof en una reunión de oración en la Iglesia Episcopal Metodista Africana de Emanuel. Después de sentarse entre ellos durante casi una hora, Roof abrió fuego mientras la gente cerraba los ojos en la oración.
Roof confesó el crimen durante un interrogatorio grabado. Pero en el juicio federal de Roof, el abogado defensor David Bruck argumentó que su cliente estaba influenciado por la odiosa retórica de elementos en Internet. El abogado Bruck quería presentar evidencias de la enfermedad mental de Roof en un intento de salvarle la vida, pero Roof se opuso a ello. En su carta, Roof dice que Bruck es judío y que "fue un motivo constante de conflicto, incluso esforzándome en ignorar eso y mirar más allá. Mis intenciones son hacer que el proceso de apelaciones de mi caso se realice de la mejor manera posible. Las apelaciones deben ser trabajadas y escritas por abogados con mejores intereses en mente", señaló.
La audiencia de esta semana podría ser uno de los últimos momentos en que las víctimas y sus familiares tendrán a Roof delante, escuchando sus palabras. El acuerdo estatal de amparo evitará un segundo juicio agotador para los sobrevivientes de la masacre y familiares de las víctimas. La fiscal de Carolina del Sur, Scarlett Wilson, ha caracterizado el acuerdo como una póliza de seguro de que Roof pasará el resto de su vida en una prisión si su sentencia de muerte federal no se mantiene. Cualquiera que sea el final, lo importante es que una persona de ese bajo nivel, esté lejos de la comunidad, antes de que haga más daño del que ya hizo, y por sus pensamientos, es obvio que no ha cambiado. Se espera que el preso sea transferido de una cárcel local a una prisión federal fuera del estado. Allí, aguardará la ejecución o la eterna prisión.
