Luis Miguel sonríe pero ya no brilla tanto
Luis Miguel, el ídolo de la canción mexicana, sigue sumando órdenes de aprehensión en su contra, más que éxitos musicales. Al litigio legal que mantiene con Alejandro Fernández tras la cancelación, por su parte, de una gira de conciertos que habían acordado realizar juntos, se suma una nueva orden de arresto en Los Ángeles, California. Esta vez porque El Sol de México no hizo acto de presencia en una audiencia que tenía pendiente, por la demanda de los 3.6 millones de dólares que entabló la discográfica Warner en su contra en el pasado mes de marzo.
El programa mexicano de espectáculos Ventaneando, de TV Azteca, fue el que ofreció esta información. Pero esto parece preocuparle demasiado a Luismi. Su más reciente aparición, en la que andaba de paseo por Las Vegas, no pasó inadvertida para sus fanáticos. Y a estos lo que más le llamó la atención, más allá de que se tratase de una figura como la de Luis Miguel, fue su actitud de desenfado y modo relax con que se le vio, amén de estos problemas que sin lugar a duda están afectando la imagen y la carrera del artista. Los conductores de este programa televisivo dijeron que a Luis Miguel se le planificó una nueva audiencia y sus abogados ya se están arreglando con la discográfica para que no tenga este asunto pendiente.
En las redes sociales circulaban un par de clips en donde aparecía subiendo en elevador. Un grupo de fanáticas se acercaron a él y fue cuando El Sol de México les ofreció algunas muestras de agradecimiento y una gran sonrisa que se convirtió en una efusiva carcajada. En el video se escucha que le preguntan: “¿Cómo te fue Luis?”, a lo que el ídolo respondió de manera precisa y breve: “Todo muy bien, gracias”.
Sin embargo, amén de esta imagen de despreocupación que proyectó el artista, no cabe dudas que estas sombras impactan de manera negativa en su carrera musical, que ya acumula 35 años. Hasta el momento, Luis Miguel ha vendido más de 100 millones de discos, ostenta diez premios Grammy y tres Antorchas de Plata en Viña del Mar; además de filmar dos películas y cantar con reconocidos artistas internacionales como Frank Sinatra. Pero lo que se sabe de su vida privada, y estos líos judiciales en los que se encuentra involucrado, no resulta tan luminoso.
Entre los primeros tropiezos que propiciaron los conflictos judiciales que enfrenta actualmente Luis Miguel, están la cancelación, en 2015, de cuatro conciertos para promocionar su disco Déjà Vu. En el año siguiente canceló nuevamente todas sus presentaciones, incluso las que se habían reprogramado para reponer los conciertos suspendidos del año anterior. Tras una ausencia prolongada de los escenarios, y los problemas legales que le asechan, muchos consideran que la carrera del artista jamás volver brillar como en años pasados, como si “El Sol” de México dejara de alumbrar por elección propia, para tristeza de gran parte de sus fanáticos, que poco a poco dejan de guardarle fidelidad a su producción musical.
