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lunes, 18 de septiembre de 2017

Wanda Metropolitano, nuevo santuario rojiblanco

Por Aliet Arzola

Tras meses y meses de espera, este sábado la afición rojiblanca entonará sus cánticos, por fin, en el Wanda Metropolitano, la nueva casa del Atlético de Madrid. Sentidas fueron las despedidas en el Vicente Calderón, a orillas del Manzanares, tras culminar la pasada contienda, cuando mucho aficionados quisieron llevarse un recuerdo del feudo colchonero durante más de medio siglo y arrancaron butacas que dejaron las gradas con un aspecto raro. Pero esa metamorfosis que sufrió el Calderón en sus últimos días ya está en la memoria, porque ahora los seguidores del club de Simeone, de “El Cholo”, corearán los nombres de Koke, Saul, Oblak y Thomas en el Metropolitano, uno de los estadios más modernos de Europa.

La instalación, que será inaugurada con el pleito liguero entre Atlético y Málaga, tiene aforo para 67 mil personas y está evaluado por la UEFA con categoría cinco estrellas, algo que solo logran los parques con elevados estándares de confort y seguridad, sin obviar las perfectas condiciones para los jugadores en el césped y los vestuarios. Los colchoneros quieren mostrar al mundo las bondades de su majestuoso santuario, y por ello optan para obtener la sede de la final de Liga de Campeones del 2019, pues ya la del 2018 está programada en el NSC Olimpiyskiy Stadium de Kiev, Ucrania. El Wanda compite por el cierre de la fiesta de la Champions con el Olímpico de Bakú, en Azerbaiyán, que también puja por organizar la discusión del cetro de la Europa League en el 2019. Tal decisión se conocerá la semana próxima, el 21 de septiembre.

De cualquier manera, el Wanda Metropolitano se exhibirá cual plaza extraordinaria en cada uno de los duelos del Atleti, que en estos momentos es uno de los equipos fijos en la Liga de Campeones. Por allí desfilarán, antes que termine el año, un histórico como la Roma, y el Chelsea, de los conjuntos más potentes en la actualidad. Además, los colchoneros planean convertir su nueva sede en el escenario fijo para las finales de la Copa del Rey, que habitualmente peregrinan entre el Bernabéu, Mestalla, el Camp Nou y el extinto Vicente Calderón. En aras de evitar polémicas por negativas de los equipos a acoger dicho evento, el Wanda se pinta como la plaza ideal, en primer orden porque los rojiblancos lo han ofrecido, y en segundo porque se trata de un estadio con todas las condiciones. Ya el conjunto de Simeone entrenó en el parque de cara al pleito liguero del sábado, y diversos medios españoles reportar que el primer gol en las porterías del recinto lo anotó el propio técnico de los colchoneros, quien durante la sesión de prácticas no pudo contenerse y disparó al arco.

El nombre del estadio hace alusión al Wanda Group, uno de los socios del Atlético en la actualidad, que intervino en el proceso inversionista, mientras el Metropolitano es una referencia al parque homónimo en que el club jugó desde 1923 hasta 1966, cuando se mudaron al Calderón. “Mi abuelo me ha contado sobre el Metropolitano, se lo que significa para el Atlético. En los tiempos modernos es bueno tener un socio como Wanda, pero todos los que tienen sangre atlética, el nombre de Metropolitano los emocionará, es hermoso. Todas mis memorias están en el Calderón, pero algún día les diré a mis nietos que jugué en el Metropolitano”, aseguró Fernando Torres en declaraciones que recoge Daily Mail. El camino para llegar al Wanda tal y como se ha visto en las últimas imágenes ha sido muy largo, pues esa instalación antes era conocida como La Peineta, y fue inaugurada en 1994.

Durante una década, el estadio organizó muy pocos partidos de fútbol y algunos eventos de campo y pista, pero en 2004 fue cerrado para poner en marcha un proyecto de cara a los Juegos Olímpicos del 2016, por los cuales Madrid pujaba con fuerza. Sin embargo, la capital española quedó fuera de la carrera que ganó Río de Janeiro y en el 2013, el Atlético ganó la propiedad de los terrenos para dar forma a su nuevo santuario. Entre las cualidades que resaltan al Wanda se encuentra su belleza, el aforo y las similitudes con los estadios ingleses, en los que el público está muy cerca del terreno. Además, destaca la estación del metro ubicada en la misma entrada del parque, la cual tiene capacidad para casi ocho mil personas, un detalle muy valioso, pues muchas de las personas que asistan a los partidos se trasladarán en ese transporte.