Avanza la reforma fiscal en Estados Unidos
Los republicanos del Senado de Estados Unidos parecen tener ya la cantidad suficientes de votos para aprobar una polémica medida presupuestaria, que es crucial para las esperanzas del presidente Donald Trump de promulgar leyes de reforma fiscal antes de fin de año. El senador John Cornyn, quien está a cargo de ordenar los votos para la legislación, dijo que esperaba que el plan fiscal de 2018 gane el apoyo necesario para desbloquear una herramienta legislativa que permita a los republicanos mover un proyecto de reforma tributaria en el Senado sin la ayuda de demócratas.
Cuando se le preguntó si los republicanos tenían suficientes votos para aprobar la medida presupuestaria, Cornyn dijo a Reuters: “Creo que sí”. La resolución requiere la aprobación de al menos 50 legisladores, en la cámara alta de 100 escaños, con el vicepresidente Mike Pence capaz de emitir un posible voto de desempate.
Los republicanos controlan al Senado solo con un margen de 52-48, y con los demócratas en contraposición al plan de Trump de entregar hasta 6 billones en recortes de impuestos a empresas y particulares, los republicanos pueden permitirse perder pocos votos entre los suyos. Un presupuesto aprobado por el Senado y la Cámara de Representantes permitiría a los republicanos utilizar un procedimiento conocido como reconciliación para mover la legislación fiscal a través del Senado con una mayoría simple, en lugar de los 60 votos necesarios normalmente.
El senador republicano Rand Paul, un halcón fiscal, ha amenazado con votar en contra de la medida. Pero los republicanos tendrían que perder tres votos para que la medida falle, y no parece haber otros dos republicanos que se opongan a la resolución. El miércoles, los republicanos votaron a favor de las enmiendas demócratas para evitar los recortes de impuestos para los estadounidenses ricos y proteger los fondos para los programas de seguro de salud de Medicare y Medicaid para los ancianos y los pobres.
Trump y los principales republicanos insisten en que el plan impositivo beneficiaría a la clase media. Los analistas argumentan que los estadounidenses ricos se beneficiarían más. Un informe publicado por el Centro para el Progreso Americano afirma que Trump obtendría personalmente 23 millones al año de un recorte de impuesto comercial propuesto, mientras que sus herederos y herederos de sus miembros del Gabinete obtendrían 3,5 mil millones de la derogación de la ley federal impuestos de sucesión.
Además, los demócratas se oponen a la resolución del presupuesto republicano en parte porque permitiría que la legislación fiscal amplíe el déficit federal hasta en 1,5 billones durante la próxima década.
