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martes, 24 de octubre de 2017

Einstein encontró la fórmula de la felicidad

Por ElizabethF.

Se trata de otra de sus geniales fórmulas. Albert Einstein, además de legarle a la humanidad su reveladora teoría de la relatividad, también le dejó el secreto de la felicidad. Nos enteramos 95 años después de la existencia de esa nota, donde está contenido el secreto de cómo tener una vida feliz, y la cual el científico le entregó a un mensajero en Tokio, debido a que no tenía monedas para dejarle propina. La nota será subastada este martes en Jerusalén.

Fue justamente durante una gira por Japón del famoso físico alemán, durante el año 1922, en la cual ofrecía conferencias en el país asiático, que ocurrió el insólito hecho. Para entonces ya Einsten conocía que el Premio Nobel de Física le sería otorgado y su fama traspasaba las barreras de los círculos científicos y se extendía más allá.

Fue entonces que un mensajero japonés llegó buscando al científico hasta el Imperial Hotel de Tokio. Le traía un mensaje. No se sabe a ciencia cierta si fue el joven quien se negó a aceptar unas monedas de propina, tal como dictan las costumbres locales, o bien Albert Einstein no tenía cambio que ofrecerle.

Sea como fuere, el científico no se permitió que el mensajero se marchara con las manos vacías, así que papel y pluma en mano le escribió dos notas a mano en idioma alemán, de acuerdo con quien ahora las vende, familiar del joven mensajero.

Quien sabe y tienes suerte y estas notas terminen siendo mucho más valiosas que lo que es una simple propina, se dice que le dijo el científico al joven. Este último, en su mano sostenía una nota, escrita en un folio común con el membrete del Hotel donde se encontraba, y en ella puede leerse la afirmación de que una vida tranquila y sencilla, nos provee de más alegría que aquella vida en que la búsqueda del éxito es un desasosiego constante.

La segunda nota, escrita en una hoja de papel, tiene grabadas las siguientes palabras: donde hay un deseo, existe un camino.

Si las notas en sí misma eran una reflexión de Einstein sobre su propia vida y fama, es algo que tanto tiempo después resulta imposible de saberse, expresó el archivista que tiene a su cargo la mayor colección del científico del mundo, en la Universidad Hebrea de Jerusalén, Roni Grosz.

Y si bien estos documentos carecen de valor científico y eran hasta el momento desconocidos por los expertos e investigadores de la vida del físico, bien podrían aportar algo de claridad sobre los pensamientos íntimos de ese genio de la humanidad que fue Einstein.

Ambas notas se pondrán a la venta este martes, justo en la casa de subastas Winner de Jerusalén, además junto con otros artículos, entre los cuales se incluyen dos cartas que Albert Einstein escribiera años después de este suceso. No debería sorprendernos. De personas geniales, pues ya Einsten demostró que vienen también consejos geniales.