El libre comercio norteamericano en duda
El Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) pende de un hilo. Las negociaciones para impulsar el pacto comercial se encontraba en una situación difícil y complicada tras las nuevas exigencias de Estados Unidos. La posición de Washington amenaza con hundir el proceso para modernizar el acuerdo. La postura de Canadá, representada en el primer ministro, Justin Trudeau, es de ponerse de acuerdo. Por ello sostuvo un encuentro con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la Casa Blanca. Pero los esfuerzos de los legisladores estadounidenses, que trabajan de conjunto con funcionarios de Canadá y México, caen en saco roto.
Lo cierto es que la presencia de Trudeau en Washington DC se produjo cuando hay asperezas en las conversaciones del TLCAN. Ello trascendió cuando el republicano Trump amenazó con dejar a sus socios comerciales abandonados. Las intenciones del mandatario estadounidense hicieron que la Cámara de Comercio acusara al Gobierno de intentar sabotear las discusiones con "propuestas venenosas".
Entre las primeras reacciones estuvo las del secretario mexicano de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, quien advirtió que un término del TLCAN podría marcar un quiebre en las relaciones entre Estados Unidos y México. A juicio del canciller de la nación azteca esto podría afectar la cooperación en áreas que no tienen relación con la esfera comercial.
También advirtió que las rondas de negociaciones sobre el tema estaban a un paso de estancarse. La principal causa de ello serían las agresivas demandas de Estados Unidos de pretender elevar abruptamente los requerimientos de origen local para componentes de autos y autopartes.
Las iniciativas estadounidenses pretenden elevar el límite para el contenido de origen norteamericano a 85 puntos porcentuales desde el 62,5 por ciento. Para ello están requiriendo la mitad del componente de fabricación estadounidense.
Otras propuestas de Washington son realizar cambios radicales al sistema de arbitraje del TLCAN, modificar las normas sobre propiedad intelectual y establecer una protección adicional para los productores estacionales de Estados Unidos.
Canadá es el principal cliente exportador de Estados Unidos. México, a su vez, se encuentra afectado por la inundación de empresas automotrices y otros en su mercado interno. Ello ha causado fuertes problemas a su economía.
