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martes, 10 de octubre de 2017

La crisis “silenciosa” de Myanmar

Por Mayli

Más de medio millón de musulmanes rohingya han huido en los últimos dos meses de Myanmar rumbo a Bangladesh, porque es cuestión de vida o muerte para ellos. Una crisis silenciada por los grandes medios, y que muchos desconocen existe. Las causas se deben a la limpieza étnica que sufre esta minoría en Myanmar y que ha provocado miles de muertos.

En los últimos dos meses, la minoría étnica de los musulmanes rohingya ha tenido que huir de su país, Myanmar, debido a la violencia militar que vienen sufriendo los de su status, en lo que algunos entendidos en derechos humanos, han llamado una limpieza étnica.

Más de medio millón de personas provenientes de Myanmar han llegado huyendo a Bangladesh, un país que también se desentiende de su crisis particular. En la huida han muerto miles también, y desde la ONU se les ha clasificado como un pueblo sin amigos, pues no le interesa a nadie. Diariamente se conoce de muertos intentando cruzar al país vecino; la noticia más reciente hablaba de 35 personas en un bote volcado en el río Naf, y de los 12 cadáveres encontrados, al menos 10 eran de niños. Solo han sido encontrados 13 sobrevivientes.

Los testigos hablan de desesperación, de que no habían comido ni bebido agua durante días, y que presionaban por moverse y alcanzar tierra como fuese posible. Así sucedió el naufragio y la muerte de tantos chicos. Inmediatamente se montó un dispositivo de rescate en el río, sobre todo formado por voluntarios de la ONU que trabajan en la zona en busca de personas vivas.

El trato militar ha sido muy hostil contra esa minoría étnica, y lo más contradictorio es que quien encabeza el gobierno de facto de Myanmar es la Premio Nobel de La Paz, Aung San Suu Kyi, quien niega que la situación con los musulmanes rohingya fuera de parte del gobierno, si no que solo se quedaba entre diferencias de creencias. O sea para la Premio Nobel, la crisis es solo entre partes opuestas.

Muchos han llegado a insinuar que convertir a esta señora en un icono de la Paz fue un craso error. La presidenta ha dicho que sí cree que hay hostilidad militar, pero que en su mayoría se trata de musulmanes que asesinan a otros musulmanes por diferencias religiosas, y por sospechas de que trabajan para uno u otro bando. Lo cierto es que la crisis de los musulmanes rohingya no es de ahora, es un caos antológicos, y donde siempre ellos se han llevado la peor parte. Pero como son un pueblo nómada, que en nada influyen ni foco de atención tienen, el mundo le ha dado la espalda y ellos siguen viviendo al límite de lo imposible.

Es hora de gritar su crisis.