La llamada que hizo el Papa Francisco al cosmos
Cuando los seis tripulantes de la Estación Espacial Internacional emprendieron su viaje al cosmos, no sospecharon que la vida les premiaría, no solo con la experiencia de explorar lo desconocido, sino también de entablar una amigable y reflexiva plática con uno de los hombres más importantes de la tierra: el Papa.
Así sucedió en la jornada de este jueves, cuando Francisco se comunicara con los jóvenes, con los que reflexionó sobre el papel del hombre en el universo, y sobre cómo es vivir "sin un arriba ni un abajo", según les dijo. "¿Cuál es su pensamiento sobre el Hombre en el universo?", cómo es vivir "sin un arriba ni un abajo", le preguntó al italiano Paolo Nespoli. Nespoli, en compañía de tres astronautas estadounidenses y dos rusos, confesó en perfecto italiano que a su entender se trataba de temas complejos, que como simple ingeniero es que siente tener pocos conocimientos frente a un universo tan inmenso.
De Francisco nada asombra, el Santo Padre es popular por sus llamadas inesperadas. No obstante a ello, al parecer comunicarse con el espacio genera una inquietud en las figuras papales, no es la primera vez que un sumo pontífice “llama” al cosmos. En el año 2011, Benedicto XVI tuvo también la iniciativa.
¿Qué puede decir un Papa para iniciar una conversación tan inusual?: "Buenos días o buenas tardes, no sé, porque cuando estás en el espacio nunca se sabe", comenzó Francisco desde su sala en el Vaticano, con el sentido del humor y simpatía que le caracteriza. Durante la charla el papa Francisco les preguntó a los astronautas qué les generaba más felicidad en el espacio.
“Ver la tierra con los ojos de Dios”, afirmó el estadounidense Randolph Bresnik, comandante de la misión; aludiendo a la belleza de "un universo sin fronteras, en paz y sereno”. “Nosotros aquí somos un ejemplo para la humanidad”, agregó Joseph Acaba, su par estadounidense, refiriéndose a la convivencia pacífica entre personas de varias nacionalidades y profesiones en el seno de la estación espacial.
Casi al finalizar la comunicación, el italiano, agradeció al papa argentino por su iniciativa: “Le agradezco por habernos elevado, por habernos sacado de la vida cotidiana mecánica, para hacernos pensar en algo más grande que nosotros mismos".
La conversación duró unos 20 minutos y fue transmitida por el Centro Televisivo Vaticano.
