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viernes, 27 de octubre de 2017

La versatilidad de Fernando Alonso: de la F1 a las 24 horas de Daytona

Por Miguel

De la versatilidad de Fernando Alonso nadie puede dudar. Sus mejores años en la Fórmula 1 parecen haber quedado atrás y la renovación con McLaren, incluso con las enormes expectativas que existen alrededor del motor Renault, no llevará al asturiano de regreso a los planos estelares donde estuvo durante tanto tiempo en la máxima categoría de la velocidad; pero, de cualquier forma, el español se sigue imponiendo a sí mismo nuevos retos. Si en 2017 sorprendió con su presencia en la Indy 500, para 2018 ya está confirmado que pilotará un Ligier JS en las 24 horas de Daytona, la carrera de resistencia más famosa de Estados Unidos.

Entre el 26 y el 27 de enero del año próximo, Alonso estará en el Daytona International Speedway de Florida, en Estados Unidos. Esto será unas semanas antes de que comiencen los primeros entrenamientos de la F1, por lo que esta nueva incursión, en una carrera en óvalo, no se interpondrá en su temporada con McLaren, como sí ocurrió con la Indy 500, en 2017, cuando el español no intervino en el Gran Premio de Mónaco. Por tanto, ahora su presencia en Daytona, además de representar una nueva experiencia servirá como preparación física para la extensa campaña en la F1.

En Daytona, Alonso correrá con el equipo United Autosports, que pertenece a Zack Brown, quien es el jefe de McLaren, así que no hay ningún conflicto de intereses. Incluso, Brown aseguró que la participación del español en las 24 horas de Daytona había sido tema de conversación durante la renovación de Alonso, pero que la decisión había sido totalmente del español.

Alonso tendrá a su lado, en Daytona, a dos jóvenes promesas británicas: Lando Norris, de 17 años y Phil Hanson, de 18. Esta será la primera vez que el español se coloque al volante de un auto como el Ligier que, tal como sucedió en Indianápolis, no tiene absolutamente nada que ver con los que está habituado a pilotear en la F1. Ahora, incluso, el auto tendrá (no podía ser de otra forma, dada la extensión de la competencia) luces para la conducción nocturna.

Daytona no forma parte de la llamada “Triple Corona”, pero, según Alonso, es una de las mejores del mundo. De acuerdo con el español, su presencia allí está vinculada con su interés por convertirse en un piloto más completo y la tomará como una preparación para probables nuevas incursiones futuras en carreras de resistencia.

Esta carrera tiene una larga historia, ya que se disputa desde 1966 y actualmente ofrece puntos para el campeonato WeatherTech Sportscar de la Federación de automovilismo norteamericana. Un detalle curioso es que en Daytona no se emplea solo el óvalo, sino que es un circuito mixto, al que se añaden secciones lentas que se extienden por 5730 metros de largo. Cada equipo (en 2017 se inscribieron 55 autos) coloca como mínimo tres pilotos por auto (por eso Alonso tiene la compañía de los dos jóvenes británicos). La firma con más victorias en la carrera es Porsche y en la extensa lista de vencedores aparece un español, Antonio García quien triunfó, en 2009, en un Riley-Porsche, del equipo Brumos. El colombiano Juan Pablo Montoya, quien corrió varias temporadas en la F1, ha ganado en tres ocasiones en Daytona.

Con Alonso a bordo del Ligier JS, de seguro aumentará el interés mediático y de los fanáticos por las 24 horas de Daytona. Esto es bueno para los negocios y para el espectáculo, como reconoció Scott Atherton, presidente de la IMSA. Brown lo tiene claro y por eso aseguró que la edición de 2018 podría ser la más dura en la historia reciente, a partir de la calidad de los equipos y de los pilotos que competirán.