Enviar por email

tu nombre: email destino: mensaje:
Nombre de Usuario: Email: Contraseña: Confirmar Contraseña:
Entra con
Confirmando registro ...

Edita tu perfil:

Usuario:
País: Población: Provincia:
Género: Cumpleaños:
Email: Web:
Como te describes:
Contraseña: Nueva contraseña: Repite contraseña:

viernes, 27 de octubre de 2017

Las mujeres desmienten los mitos del aborto

Por G_nkerbell

Existen dos métodos actualmente de aborto, el médico, que utiliza instrumentos especializados para realizar una aspiración suave en el útero, y el que se realiza a través de medicamentos y por medio de píldoras se interrumpe el embarazo haciendo que el útero expulse su contenido al comienzo de la gestación. Una mujer puede decidir practicarse un aborto, del tipo que sea, aunque por supuesto, debe conocer las respuestas anteriores y cada una de las partes que conforman este proceso, pes la ignorancia, desinformación y duda son las causantes de los errores. Además, existen mitos alrededor del aborto entre mujeres y hombres de todas las edades y por ello que los abortos clandestinos se han vuelto una amenaza las féminas.

El aborto es un procedimiento de interrupción de embarazo que aún hoy es mal visto por muchas culturas y religiones y considerado incluso el asesinato de un ser humano. Existen dos métodos actualmente de aborto, el médico, que utiliza instrumentos especializados para realizar una aspiración suave en el útero y el que se realiza a través de medicamentos y por medio de píldoras se interrumpe el embarazo haciendo que el útero expulse su contenido al comienzo de la gestación.

Hoy en día, ambos procedimientos se realizan con técnicas muy eficaces y modernas y el primero tiene, según estudios, un 99 % de eficacia en todos los casos, mientas que el segundo es alrededor del 93 al 98 % eficaz en la interrupción, dependiendo de la semana en la que se tomen las píldoras. El procedimiento médico tarda alrededor de 10 minutos, sin contar el tiempo de preparación y el realizado mediante tratamiento con píldoras en la mayoría de los casos se completa 24 horas después de tomarse la segunda píldora; o sea, entre 2 y 3 días.

Por ello, muchas mujeres del mundo se han dado a la tarea de reescribir sobre esos antiguos mitos sobre el aborto. De hecho y contrario a lo que se cree, abortar es muy común, un estudio realizado por el Instituto Guttmacher –organización líder en investigación y políticas sobre especializad en salud sexual y reproductiva– indica que el 30 % de las mujeres estadounidenses se ha practicado un aborto a los 45 años. Por tanto, practicarse un aborto no tiene nada que ver con la edad, la condición económica o el color de piel, sino con esperar el mejor momento para tener un bebé.

Según cifras, una mujer muere por cada 100 mil abortos legales realizados por un profesional, demuestran las estadísticas del conteo de mortalidad del embarazo de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades. Además, indican que el riesgo de morir al abortar se incrementa conforme más tiempo se deje avanzar el embarazo.

Otro tópico, aunque obviamente existe la posibilidad de arrepentirse tras un aborto, la mayoría de las mujeres que abortan sienten un gran alivio después de hacerlo y también un agradecimiento con las personas que la apoyaron en ese momento. Muchas consideran que practicarse un aborto fue una decisión difícil, pero la mayoría confirma que fue una elección de la que no se arrepintieron.

En la mayoría de los países, practicarse un aborto hasta las 12 semanas es completamente legal, además existe una lista de clínicas acreditadas en las que atienden de manera profesional a cualquier mujer para llevar a cabo este procedimiento sin ningún riesgo.

Otro mito que se ha ido eliminando es que el aborto es un asesinato. Ya muchos estudios biológicos han aclarado que tanto espermatozoides como óvulos son solamente células, unidades de vida que se fecundan para originar otra nueva célula que contiene la información genética de los dos progenitores del feto que está por producirse, pero que aún no lo es.

Esa célula-huevo no es un individuo biológico, porque no puede sobrevivir de manera independiente. Los embriones, cigotos y fetos, no son individuos biológicos puesto que aunque están compuestos por células en las que hay vida, estas no son capaces de independizarse. Por lo tanto, la destrucción de una célula o un conjunto de ellas no puede ser considerada un homicidio.