Llegar al zen con la tecnología sin cable
Así como la tecnología inundó nuestras vidas, del mismo modo lo han hecho los cables que la acompañan. Ordenadores, equipos electrodomésticos, celulares, todos necesitan cables para poder conectarse a la electricidad y poder funcionar. Los cables están por doquier y ayudan a crear un ambiente caótico y regado, que para muchos representa un problema, sobre todo para los más organizados, u obsesivos con el orden de los espacios que habitan. Tal parece que tratar de vivir sin cables actualmente es imposible. Sin embargo, no es así del todo, sí está en nuestras manos, o mejor dicho, en el de las tecnologías, evitar convivir con marañas de cables.
Los expertos de la gestión de cables nos enseñan en sus escritorios cómo el minimalismo y el orden pueden darnos muy buenos resultados. El cable management o gestión de los cables deviene por estos días en un arte practicado por quienes son obsesivos del orden. Las técnicas que de utilizan para organizar los cables de los ordenadores y equipos en grandes instalaciones o centros de datos pueden aplicarse en espacios más pequeños como en nuestra oficina del trabajo. Esto lo demuestran los usuarios de la comunidad DeskCableManagement, de Reddit. Allí en ese espacio relatan las distintas vías por las cuales logran ocultar de la vista de todos los cables de sus equipos.
Las personas que integran esta comunidad logran el éxito a la hora de organizar el cableado de forma óptima. Y hasta ofrecen consejos sobre la mejor manera de hacerlo. De ahí que tengan escritorios libres de marañas de cables cerca. Es toda una subcultura que gira en torno a la gestión de cables, que incluso ha creado una industria con aditamentos que facilitan está tarea, entre ellos tiras de velcro, canaletas especializadas, latiguillos y otras herramientas que podemos encontrar en tiendas sobre todo online. Estas herramientas permiten que todo quede oculto bajo la mesa, en un trabajo que puede llevar horas y horas de dedicación, y al final resulten en una pequeña obra de arte del orden en la gestión de cables.
Queda demostrado que para llegar al zen no solamente hay que practicar clases de yoga o meditación. Hacer una actividad que resulte placentera, y que tenga resultados que incidan de manera beneficiosa en la estabilidad emocional, realmente no tiene precio. Y si la organización de cables es uno de estos caminos, pues bienvenido. Solamente se necesita tiempo y una pequeña inversión para lograr una mágica maravilla del orden que nos lleve al zen sin cables en nuestros escritorios y oficinas de trabajo.
