Más pistas sobre el asesinato de la periodista sueca
La periodista sueca Kim Wall desapareció desde el 10 de agosto cuando estaba haciendo un reportaje sobre el inventor danés Peter Madsen y su submarino casero. Once días después, el torso mutilado de una mujer apareció flotando en las costas danesas, y casi dos meses después de aquello, aparecen dentro de unas bolsas, la cabeza, piernas y ropas de la reportera.
La periodista sueca Kim Wall no sabía que haría su último reportaje el día que se subió al submarino casero del inventor danés Peter Madsen. Kim, llevaba varias semanas detrás del inventor para completar su investigación, y en esta ocasión completaría el éxito del invento, siendo parte de un breve recorrido submarino. La vieron por última vez subiendo el mismo el 10 de agosto.
Fue su pareja quien llamó la atención de la policía sobre la desaparición de Kim, y puso en el ojo del huracán al inventor, quien fue encontrado unos días después, cuando salía a flote de un supuesto accidente de su submarino. Madsen negó que hubiese asesinado a la joven de 30 años, y primero dijo que la había dejado sana y salva en tierra, y luego con la aparición del torso mutilado, cambió y dijo que la chica había sufrido un terrible accidente dentro del submarino (se había golpeado la cabeza) y él la había enterrado en el mar. Incluso dijo que había intentado suicidarse él, hundiendo el submarino, pero falló. Aunque Madsen niega la mutilación también, dentro del artefacto se encontró sangre de la periodista, que probaba que había estado allí, y que algo anormal había sucedido dentro.
Ahora, con las nuevas partes de su cuerpo encontradas (cabeza, brazos y la ropa que usaba), la versión de Madsen sigue siendo más increíble, y el crimen más espeluznante. El inspector de la policía danesa, al frente de la investigación criminal, Jens Moller Jensen, dijo que las partes se encontraban dentro de bolsas, con metales pesados dentro, con el objetivo de que no flotaran, lo que hicieron finalmente. Salieron a flote, muy cerca de donde encontraran en primer lugar el torso de la joven. Las pruebas de ADN confirmaron luego que se trataba en efecto de la joven periodista.
Otros resultados que arrojaron los análisis forenses es que el cráneo de Kim, no mostraba signos de fractura ni de algún golpe contundente, algo que no cuadraba con la versión del inventor. Antes, el fiscal del caso había informado que se habían encontrado filmaciones de decapitaciones en un disco duro, supuestamente perteneciente a Madsen. Las investigaciones continuarán, y la prisión preventiva al inventor se extenderá a cuatro semanas más. La joven periodista había trabajado para varios medios de importancia, como el New York Times, The Guardian o Vice Magazine, y había estado en varios países para cubrir historias, desde Uganda pasando por Cuba.
