Enviar por email

tu nombre: email destino: mensaje:
Nombre de Usuario: Email: Contraseña: Confirmar Contraseña:
Entra con
Confirmando registro ...

Edita tu perfil:

Usuario:
País: Población: Provincia:
Género: Cumpleaños:
Email: Web:
Como te describes:
Contraseña: Nueva contraseña: Repite contraseña:

sábado, 21 de octubre de 2017

Portugal no escapa de la corrupción

Por LauraB

La corrupción es un fenómeno típico de América Latina, pero tiene sus efectos en varios países. Por ejemplo, en Portugal, donde el anterior primer ministro, José Sócrates, está acusado de corrupción. La Fiscalía impuso una denuncia en su contra de 31 delitos de corrupción pasiva, blanqueo de capitales, falsificación de documento y fraude fiscal en el periodo comprendido entre los años 2005 y 2011. Según el ente durante esa etapa el político portugués acumuló la supuesta cifra de 24 millones de euros, los que guardó en una cuenta en Suiza. La acusación del Ministerio Público encendió las alarmas en un país muy conservador políticamente.

La acusación y el proceso judicial sobre Sócrates involucran por primera vez a un político de tan alto rango. El ex primer ministro de esa nación europea lleva cerca de tres años esperando su veredicto desde que fuera detenido en el 2014 en el aeropuerto de Lisboa por sospechas de corrupción. Sócrates estuvo diez meses en prisión preventiva y uno y medio en arresto domiciliario. Su espera concluyó tras el dictamen de la Fiscalía lusa.

Según las acusaciones, el ex premier y otras 19 personas además de nueve empresas, formaron parte de la llamada "Operación Marqués". La lista incluye a uno de los hombres más poderosos de Portugal: a Ricardo Salgado, el ex presidente del Banco Espíritu Santo.

Las denuncias de la Fiscalía fueron recogidas en más de cuatro mil páginas. En las mismas se denuncia que el ex primer ministro portugués recibió supuestamente más de 24 millones de euros. Acorde con las acusaciones Sócrates recibió esa cantidad por beneficiar a un grupo de empresas. Sus acciones habrían facilitado los negocios en esferas como el agua, los residuos y energía.

Los fiscales manejan la teoría de que todo el dinero que llegó a manos de Sócrates engordó sus cuentas bancarias en Suiza. La mayoría del tráfico de ese efectivo fue por cuestiones de pagos por prestación de servicios que nunca existieron.

La Fiscalía denunció que era que el ex primer ministro también obtuvo ganancias del Grupo Vale de Lobo. A este Salgado le pagaba igualmente en "agradecimiento" por su gestión para una compañía de la cual era accionista.

En total, la Fiscalía imputa al ex jefe de Gobierno portugués y destacada figura del Partido Socialista por tres delitos de corrupción pasiva, 16 de blanqueo de capitales, nueve de falsificación de documentos y tres de fraude fiscal cualificado. Sócrates dijo que demandaría al Estado debido a una situación que describió como "escandalosa".