Enviar por email

tu nombre: email destino: mensaje:
Nombre de Usuario: Email: Contraseña: Confirmar Contraseña:
Entra con
Confirmando registro ...

Edita tu perfil:

Usuario:
País: Población: Provincia:
Género: Cumpleaños:
Email: Web:
Como te describes:
Contraseña: Nueva contraseña: Repite contraseña:

miércoles, 4 de octubre de 2017

Turquía, la meca del trasplante capilar

Por DianaLeon

En los últimos años Turquía ha comenzado a considerarse como la meca del trasplante capilar. En ese país se realizan diariamente unas 200 intervenciones de ese tipo. En el año 2016 unos 65 mil extranjeros acudieron a clínicas turcas para injertarse pelo. En su mayoría proceden de países árabes, aunque cada vez son más los europeos que se decantan por la nación, especialmente italianos y españoles. En el caso de España, las clínicas turcas abrieron oficinas de representación en Madrid, Barcelona y otras ciudades españolas o emplean empresas intermediarias. Los bajos precios hacen el viaje a Turquía muy rentable, pues los costos están entre los 2 mil y los 3 mil euros por operación, e incluyen un par de noches en algún hotel e incluso hay paquetes que alargan la estancia para hacer turismo por Estambul, con transportes y un intérprete.

En los últimos años Turquía ha comenzado a considerarse como la meca del transplante capilar. En ese país se realizan diariamente unas 200 intervenciones de ese tipo. La capital de este “imperio” capilar es Estambul, la ciudad más grande de Turquía, y en la que se ha vuelto común la presencia de hombres con las cabezas rapadas y vendadas parcialmente.

Los especialistas señalan que los precios más bajos en comparación con los países europeos y la calidad que se obtiene luego del procedimiento son grandes incentivos. Ugur Camlibel, miembro de la dirección de la clínica privada Jinemed (una de las clínicas turcas que efectúan transplantes capilares), explica que la experiencia y la formación de los doctores turcos es muy alta y añade que la localización de Turquía la convierte no solo en opción para pacientes de Europa occidental, sino también de Oriente Medio, África del Norte, los Balcanes y Asia.

En los últimos años, ese país ha pasado a ser uno de los líderes mundiales de los transplantes capilares, una disciplina de la cirugía estética. Por ejemplo, en el año 2016 unos 65 mil extranjeros acudieron a clínicas turcas para injertarse pelo. En su mayoría proceden de países árabes, aunque cada vez son más los europeos que se decantan por la nación, especialmente italianos y españoles. En el caso de España, las clínicas turcas abrieron oficinas de representación en Madrid, Barcelona y otras ciudades españolas o emplean empresas intermediarias.

El doctor Levent Acar explica que el procedimiento, el llamado método 'FUE', en el cual se extraen los pelos, por ejemplo de la nuca, y se injertan uno a uno en la parte más necesitada de la cabeza. El primer paso del proceso es rapar al paciente y dibujar líneas sobre la cabeza y la nuca para separar la zona donante de la trasplantada. Luego los médicos le indican al paciente los 'graft' (unidades foliculares que contienen de uno a cinco pelos) que van a injertar. Ya en quirófano, tras la anestesia local, los doctores extraen pelo por pelo con una micropinza de 0,8 milímetros, y luego abren los agujeros necesarios en la parte del cráneo e introducen los cabellos. Este proceso dura unas ocho horas con un descanso entre medias de 30 minutos.

Pau Vilanova, gerente de la empresa CapilClinic, dedicada a llevar pacientes a Estambul, explica que los precios pueden ser cinco o seis veces menores que en cualquier ciudad europea o de Estados Unidos, pues no es una operación que requiera material costoso, sino sobre todo capital humano. En el caso de Turquía, los salarios son más económicos, por lo que disminuye el precio. Además, hay mucha competencia por lo que las empresas turcas ajustan el precio al máximo. Vilanova asegura además, que las instalaciones y los equipos médicos están muy avanzados, a la altura de cualquier europeo.

En Turquía, en las últimas décadas la cirugía plástica y la microcirugía han avanzado enormemente. De acuerdo con el doctor Abdullah Etöz, del hospital Acibadem Bakirköy, esto está relacionado con los numerosos accidentes laborales y heridas de guerra que tratan los hospitales turcos en el año. El cirujano Zekerya Kul, que tiene su propia clínica añade que los implantes capilares se han desarrollado tanto que las técnicas empleadas son más avanzadas incluso que las de Estados Unidos. Explica que el sector comenzó a crecer debido a la demanda interna, al igual que Rusia se ha especializado en la cirugía ocular e Irán en la rinoplastia.

El proceso de este tipo de cirugía es incentivado además por un interés del gobierno por desarrollar un turismo de salud, con el objetivo de que para 2023 Turquía se convierta en uno de los tres mayores destinos mundiales del turismo sanitario. Con ese fin las empresas sanitarias turcas reciben subvenciones para promocionar y abrir oficinas en el exterior. Tan solo en el 2016 unos 750 mil extranjeros acudieron a Turquía para tratamientos médicos, dejando unos 5 mil millones de euros en el país.

Gökhan Izlisu, responsable para Europa del grupo sanitario Acibadem indica que la cirugía estética es solo uno de los muchos campos que trabajan. Añade que desde hace 12 años, reciben pacientes extranjeros, fundamentalmente para tratamientos de fertilidad, contra el cáncer, neurocirugía y trasplantes de órganos, porque tiene convenios con los sistemas de salud de varios países.