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martes, 24 de octubre de 2017

Un vínculo muy fuerte

Por LisyFa

Es bien conocido que el hecho de cuidar a una persona seriamente enferma es un esfuerzo constante y también estresante que aumenta los riesgos tanto de ansiedad como de depresión. Pero ahora, un equipo de científicos de la Universidad Estatal de Kent en Ohio, Estados Unidos, ha demostrado que sucede algo similar con los cuidadores de mascotas.

Según las conclusiones del estudio, que fue publicado por la revista Veterinary Record, lo que se conoce como “carga del cuidador” –la persona que se ocupa de otra enferma-, expone a depresión, pero calidad de vida y aislamiento desde el punto de vista social. Y, a pesar de que ese fenómeno ha sido ampliamente estudiado con humanos, rara vez o nunca se ha analizado en el caso de los dueños de mascotas o incluso veterinarios.

Debido a eso, los expertos exploraron el vínculo entre la carga del cuidador de los dueños de mascotas diagnosticadas con una enfermedad crónica o terminal y el riesgo de ansiedad y depresión por parte de los humanos, así como de los veterinarios que se dedicaron a apoyar tanto a animales como a sus dueños en el transcurso de la enfermedad.

Los participantes de ambos grupos fueron emparejados por edad, sexo y especie de la mascota que tenían. Examinaron y compararon los niveles de estrés, depresión, ansiedad y calidad de vida de los participantes usando una versión de la Entrevista Zarit Burden, un cuestionario cuyo objetivo es evaluar la carga del cuidador entre las personas que habitualmente brindan atención a las personas mayores.

Descubrieron que los dueños de gatos y perros con enfermedades crónicas o terminales estaban, como era de esperar, expuestos a altos niveles de estrés y exhibían síntomas de ansiedad o depresión. También informaron tener una calidad de vida mucho menor. Este efecto perjudicial también afectaba a los veterinarios.

Aunque habrá que seguir indagando en este tema, se trata de un estudio pionero en el contexto de la atención veterinaria.