Una aguada manifestación contra la independencia
Cerca de dos mil personas se manifestaron este miércoles por la tarde en las calles de Barcelona contra la independencia de Cataluña. La lluvia tiñó la jornada donde los lemas contra el secesionismo y sus representantes principales dominaron las protestas. El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y su vicepresidente, Oriol Junqueras, fueron el objeto de quejas en la plaza Francesc Macià donde tan solo 24 horas antes tuvo lugar la concentración en apoyo a los líderes de ANC y Òmnium encarcelados de manera provisional.
“Viva España”. “Puigdemont a prisión”. Los dos cánticos tiñeron la jornada de este miércoles donde cerca de dos mil personas, según fuentes de la Guardia Urbana de Barcelona, se manifestaron en contra de la independencia de Cataluña. La ciudad condal volvió a convertirse en el epicentro de las protestas que en las últimas semanas no paran de sucederse, ya sea a favor o en contra del proceso secesionista. La fuerte lluvia que durante la tarde del miércoles cayó sobre Barcelona no silenció los cánticos de los congregados en la plaza Francesc Macià.
El mismo escenario había sido hace menos de 24 horas el campo de concentración a favor de la liberación de los líderes de ANC y Òmnium, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart. Aunque los convocados a manifestarse el miércoles no encontraron la calzada tan limpia como los que lo hicieron el miércoles. Y es que la cera, de las velas usadas en la manifestación pro independencia, dejaron su rastro a lo largo de la avenida Diagonal. Algo que supuso una ardua tarea de limpieza en la mañana del miércoles donde los operarios de Ayuntamiento tuvieron que eliminar de manera individual cada una de las manchas.
Menos de un día separaban ambos concentraciones tan equidistantes. Si el martes la concentración apoyaba la salida de prisión de dos pilares básicos del proceso independentista en la calle; el miércoles las protestas iban dirigidos, justamente, contra ellos y toda la cúpula del secesionismo catalán.
Cargados con banderas de España y bajo el lema “Basta Puigdemont, basta Junqueras”, los dos mil congregados centraron sus protestas y rechazo en ambos personajes políticos. Tanto el presidente de la Generalitat de Cataluña como su vicepresidente no son personas gratas para aquellos que no apoyan la independencia y que ven en Puigdemont y Junqueras a los responsables de la deriva que azota Cataluña en las últimas semanas.
