42 años desaparecida
Un misterio vigente desde agosto del año 1975, es el que tienen los investigadores en el estado de Nueva York, que habían realizado una investigación para la búsqueda de una mujer llamada Flora Stevens, quien fue reportada como desaparecida en la localidad de Monticello. Su esposo la había acompañado hasta el consultorio de un médico, pero cuando fue a recogerla no la encontró y ya nunca más supo de ella. Pero hace poco tiempo, el detective Yan Salomon, de la Policía Estatal de Nueva York, contactó a la Oficina del Alguacil del Condado Sullivan para lograr identificar un cadáver de 1975 que acaban de encontrar. Después de revisar varios reportes de personas desaparecidas en esa época, Salomon encontró que las características del cadáver podrían coincidir con las de Flora Stevens y pensó haber hallado a la mujer desaparecida.
Se ven cada día en este mundo casos inimaginables, y con la evolución de la tecnología y el paso del tiempo, muchas cuestiones encuentran solución. Por ejemplo, un imsterio vigente desde agosto del año 1975, es el que tienen los investigadores en el estado de Nueva York, que habían realizado una investigación para la búsqueda de una mujer llamada Flora Stevens, quien fue reportada como desaparecida en la localidad de Monticello. Su esposo la había acompañado hasta el consultorio de un médico, pero cuando fue a recogerla no la encontró y ya nunca más supo de ella. Durante las siguientes décadas, 42 años específicamente, los investigadores realizaron varios intentos por encontrar alguna pista de su paradero en varios territorios de Estados Unidospero hasta ahora, sin ningún resultado visible.
Pero hace poco tiempo, el detective Yan Salomon, de la Policía Estatal de Nueva York, contactó a la Oficina del Alguacil del Condado Sullivan para lograr identificar un cadáver de 1975 que acaban de encontrar. Después de revisar varios reportes de personas desaparecidas en esa época, Salomon encontró que las características del cadáver podrían coincidir con las de Flora Stevens y pensó haber hallado a la mujer desaparecida.
El detective Rich Morgan, del Condado Sullivan, era quien estaba a cargo del caso de Stevens, por lo que buscó en las bases de datos federales y estatales a algún familiar de la mujer que había desaparecido para intentar hacer una prueba de ADN e identificar. No logró encontrar a nadie cercano, pero esa búsqueda de un familiar fue la solución del misterio de Flora Stvens.
Hasta sus 36 años, Stevens era una empleada en un hotel de Monticello, que desapareció sin dejar una pista. En la búsqueda de un familiar para hacer la prueba de ADN, el detective encargado descubrió que alguien estaba usando el número de seguro social de Stevens en el estado de Massachusetts. Y así fue como los investigadores acudieron hasta el hogar para ancianos en Lowell, localizado a unos 37 kilómetros de Boston.
Allí descubrieron que Flora Stevens era conocida como Flora Harris. Los detectives le mostraron una foto de una identificación del hotel Concord, lugar en el que la mujer había estado trabajando en el tiempo en el que desapareció. Ella respondió solo con la palabra, "yo", pues padecía un avanzado estado de demencia. Luego de confirmar su identidad y su padecer, las autoridades entendieron que nunca podrán saber qué pasó en esos 42 años e la vida de Stevens. Debido a su enfermedad, es un misterio saber cómo y por qué desapareció, explicaron los investigadores.
No obstante, los encargados de la investigación policial sobre el caso de la desaparición de Flora Stenvens, celebraron que finalmente la hayan encontrado después de tanto tiempo de infructuosa búsqueda. No es común que resuelvan el caso de una persona de 42 años, explicaba el alguacil del condado Sullivan, Mike Schiff, en un comunicado, pues los datos de esas épocas se van perdiendo con el paso de los años y las tecnologías evoluciona cada vez más, por lo que muchas de las técnicas que se utilizaron décadas a tras han quedado obsoletas y se requieren nuevas investigaciones desde cero.
Los registros médicos muestran que Flora Stevens vivió en centros de cuidado de Nueva Hampshire y Nueva York antes de llegar a Lowell en e año 2001. Según fuentes de la institución, la desaparecida señora no tiene actualmente familiares vivos y su antiguo esposo murió en el año 1985. Lo principal es que se sabe que Flora está bien y que vivió los últimos 42 años una vida normal, aunque la causas de su desaparición seguirán siendo un permanente misterio, dijo el alguacil Schiff.
