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jueves, 16 de noviembre de 2017

¿Cómo enfrentar la infertilidad masculina?

Por Jacky

Aún en sociedades machistas o donde el machismo sigue estando latente, cuando se dan problemáticas en la concepción de las parejas, por lo general se asume que los motivos son por infertilidad femenina. Sin embargo, según los datos, la realidad es que en 4 de cada 10 casos de parejas con estos problemas, la infertilidad está asociada al hombre. Aunque menos visible, la infertilidad masculina es igual de relevante que la femenina. En ese sentido, indudablemente el fomento de las investigaciones relativas a la selección de espermatozoides es de gran importancia para mejorar los resultados en los tratamientos de reproducción asistida. Encaminado a esto, el Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI), en España, presentó 3 estudios centrados en mejorar el diagnóstico y el tratamiento de la infertilidad masculina.

La infertilidad es una enfermedad que afecta a la pareja, que se ve imposibilitada para concebir de forma natural o de llevar un embarazo a término luego de un año de relaciones sexuales constantes, como mínimo 3 veces por semana, sin uso de algún tipo de método anticonceptivo.

De hecho, según estadísticas de la página Fivfrance, la infertilidad afecta aproximadamente al 15 por ciento de las parejas. Y de estos casos, cerca del 33 por ciento se deben a un factor masculino, 21 por ciento a un factor femenino, 40 por ciento es de tipo mixto y el 6 por ciento restante es por causas inexplicables.

De ahí se desprende que, aunque menos visible, la infertilidad masculina es igual de relevante que la femenina. En ese sentido, indudablemente el fomento de las investigaciones relativas a la selección de espermatozoides es de gran importancia para mejorar los resultados en los tratamientos de reproducción asistida.

Encaminado a esto, el Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI), en España, presentó 3 estudios centrados en mejorar el diagnóstico y el tratamiento de la infertilidad masculina. Y es que como señaló la coordinadora de los laboratorios de Andrología de IVI y directora del Laboratorio de Andrología y Banco de Semen de IVI Sevilla, Cristina González, actualmente por lo general se realiza a los hombres un seminograma o espermiograma (análisis del semen), sin embargo, esta es una prueba que deja sin analizar factores que influyen en la calidad seminal además de la concentración de espermatozoides, su movilidad y su aspecto morfológico.

Uno de los estudios realizados por los especialistas del IVI está relacionado con la llamada dotación cromosómica haploide. Y es que el espermiograma no toma en cuenta ese factor, ni la calidad o cantidad de material genético de los espermatozoides. En ese sentido, según los resultados del estudio llevado a cabo por la Dra. González, algunas de las alteraciones cromosómicas son causa de una peor calidad del semen y una menor tasa de embarazo.

La manera de determinar si estas alteraciones cromosómicas son la fuente de la infertilidad masculina es muy sencilla, pues sólo se debe realizar un cariotipo o fotografía de todos los cromosomas de una célula, algo que se logra a través del análisis de sangre rutinario que se aplica a todas las parejas al inicio de los tratamientos de reproducción.

Otra prueba presentada por el IVI con la cual se mejoraría el diagnóstico de la infertilidad masculina es el estudio del contenido de ADN espermático o ploidía espermática, que se realiza a través de una citometría de flujo, que consiste en proyectar una luz láser en las células y posibilitando el análisis de diferentes características celulares, como la morfología, de acuerdo con el marcador utilizado. Para esta prueba podría utilizarse la misma muestra que para el seminograma.

Pero la característica que diferencia los resultados de esta prueba es que de acuerdo a los especialistas, las roturas en la cadena del ADN del espermatozoide, conocidas como “fragmentación del ADN espermático”, hacen que las posibilidades de lograr un embarazo a término sean menores y, además, un contenido anormal de ADN de los espermatozoides interviene en la calidad embrionaria.

Como explica el Dr. Alberto Pacheco, Director del Laboratorio de Andrología de IVI Madrid, en su investigación, durante la generación de los espermatozoides en los testículos, su contenido genético se reduce para que, una vez fecundado el óvulo, el embrión resultante no tenga información genética de más, pero ese proceso es el da el fallo en ocasiones.

Pacheco señala que el estudio permitió observar, también, que los pacientes presentan células subploides en un 20 por ciento de los casos, cifra muy superior al 8 por ciento detectado entre los donantes. La relevancia de este hallazgo radica que sus implicaciones sobre la tasa de fecundación y la proporción de embriones viables para su transferencia.

El tercer estudio fue a partir de las investigaciones del Dr. Nicolás Garrido, Director de la Fundación IVI. Este presentó los resultados de un metanálisis realizado en colaboración con 2 centros de reproducción asistida de Brasil y que está vinculado con la posibilidad de una mejora en la efectividad de los tratamientos de fertilidad.

Generalmente, cuando se va a hacer una fecundación in vitro, se obtienen los espermatozoides por el eyaculado, igualmente en el caso de hombres con un bajo recuento de estos y en los que estos tengan roturas o lesiones en el material genético, que como señalamos en párrafos anteriores, se conoce como fragmentación del ADN.

Sin embargo, este tercer estudio detectó que dicha fragmentación fue un 24 por ciento menor cuando el esperma se obtuvo mediante biopsia testicular, hallazgo que sin dudas repercute en una mejor calidad y en mayores probabilidades de embarazo, menos abortos y mayor tasa de recién nacido vivo. Y es que aunque la biopsia en una técnica más invasiva, esta amplia cantidad de mejoras justificaría realizar el procedimiento en este tipo de casos.