El Ballet de Cuba a través de la lente de NatGeo
Uno de los fotógrafos de la National Geographic, el uruguayo Santiago Barreiro, he tomado una serie de instantáneas de la reconocida Escuela Nacional de Ballet de Cuba. En el fotorreporraje, titulado “Al interior de la Escuela Nacional de Ballet de Cuba”, se puede observar una perspectiva más humana y cotidiana de la vida en los salones del centro. Barreiro es miembro de la comunidad National Geographic Your Shot, y ha fotografiado a algunos de los mejores bailarines del mundo. El fotógrafo refiere que estuvo cerca de un año asegurando la realización del proceso dentro de la institución. Uno de los mayores valores de estas instantáneas es que ponen en la mira características del sistema cubano en el que se potencian dos pilares fundamentales: la educación y la cultura.
Este 16 de noviembre la Villa de San Cristóbal de la Habana cumplió sus primeros 498 años. Desde hace un buen tiempo la celebración viene acompañada de la inauguración de obras sociales y culturales.
La Oficina del Historiador de la Ciudad lidera un movimiento perpetuo de acciones y obras con vistas a que el quinto centenario sorprenda a La Habana con un rostro nuevo , fiel a su pasado; con sus edificios y monumentos en óptimas condiciones; y los servicios – para nacionales y visitantes foráneos – cada vez de mejor calidad.
Y precisamente en una de los sitios emblemáticos de La Habana: la calle Prado se encuentra una institución que ha sido motivo de elogios esta semana por la publicación National Geographic.
Y es que uno de los fotógrafos de la National Geographic, el uruguayo Santiago Barreiro, he tomado una serie de instantáneas de la reconocida Escuela Nacional de Ballet de Cuba. Esta es la institución educativa especializada en la enseñanza de la danza, más grande del mundo y la más importante del país…
Barreiro es miembro de la comunidad National Geographic Your Shot, y ha fotografiado a algunos de los mejores bailarines del mundo. El fotógrafo refiere que estuvo cerca de un año asegurando la realización del proceso dentro de la institución. En el fotorreporraje, titulado “Al interior de la Escuela Nacional de Ballet de Cuba”, se puede observar una perspectiva más humana y cotidiana de la vida en los salones del centro.
Y es que, como señala el autor, estaba más interesado en el día a día, en cómo viven, en la parte humana de los alumnos, que se convierten en algunos de los mejores bailarines de ballet del mundo, valorados por su riguroso entrenamiento y el estilo cubano único que combina formas europeas y americanas con influencias afrocubanas.
Tales detalles espontáneos surgen a lo largo de su trabajo, con momentos individuales que Barreiro acumuló un sentido de la importancia nacional del ballet en Cuba.
En ese sentido, el artista refiere que los cubanos están muy orgullosos de sus bailarines, refiere que en Cuba el bailarín es una estrella, el orgullo de su familia, y añade que el bailarín es muy respetado, nunca considerado feminizado debido al ballet, algo que como señala, es fantástico para él.
Uno de los mayores valores de estas instantáneas es que ponen en la mira características del sistema cubano en el que se potencian dos pilares fundamentales: la educación y la cultura.
