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miércoles, 22 de noviembre de 2017

En Alemania, los niños no pueden llevar smartwatches

Por Nilyam

Muchos expertos de diversas partes del mundo han cuestionado el nivel de seguridad y privacidad de los smartwatches, y en especial aquellos diseñados para el uso exclusivo de los infantes entre los cinco y 12 años, decorados con figuras animadas que buscan llamar la atención de los más pequeños. La legislación alemana ha ido más allá, y ha puesto en vigor una ley que prohíbe la venta de relojes inteligentes para niños que tengan alguna función que permita el "espionaje".

Estos dispositivos no son más que relojes de pulsera que poseen prestaciones distintas a los relojes convencionales, las cuales han evolucionado con el paso del tiempo. Los smartwatches de hoy día son capaces de tener acceso a Internet, hacer y recibir llamadas telefónicas, enviar y recibir emails y SMS, recibir notificaciones del smartphone, e incluso permiten revisar las cuentas que tenemos en las diferentes redes sociales. Aunque estas funcionalidades se encuentran disponibles en los teléfonos inteligentes, todavía los smartwatches gozan de gran popularidad porque son muy cómodos a la hora de usarlos en determinados momentos, por ejemplo, cuando estamos haciendo ejercicios.

La decisión de prohibir el acceso de estos sofisticados relojes a los niños ha sido tomada por las autoridades de la Agencia Federal Alemana de Internet, que asimismo ya ha adoptado medidas contra varias ofertas del producto en Internet. En un comunicado emitido por la institución se explicita una de las razones que llevaron a poner en práctica dicha norma: “los padres los usan para espiar a sus hijos, a través de una aplicación y el micrófono que incluyen”. Y es algo a lo que se opone la Agencia, pues considera que estos dispositivos no están autorizados a realizar este tipo de transmisión “ajena al dueño del reloj”.

Según explica Jochen Homann, presidente de la agencia, investigaciones realizadas por este centro han dado como resultado que, por ejemplo, los padres de los chicos usaban los dispositivos para “espiar” cómo los maestros impartían las clases a sus hijos. Y como destaca el texto de la Agencia: “grabar conversaciones sin el consentimiento de todas las personas involucradas, está prohibido en Alemania”. Pero la lucha en este país europeo contra el empleo de relojes inteligentes por parte de los más pequeños no será tarea fácil, pues su uso está muy generalizado en la sociedad y además es bien amplia y variada la oferta de estos relojes en el mercado del Viejo Continente, tanto en Internet como en establecimientos comerciales. Sin contar que muchos de estos smartwatches poseen la función que permite escuchar de forma remota las conversaciones que mantiene el dueño del dispositivo.