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viernes, 24 de noviembre de 2017

La colorida tumba de Carlo Annoni, enfermero y activista LGTB

Por Arango

Parece que ni después de muertos se detrmina con el estigma y la discriminación, principalmente con aquellas personas que en vida pertenecieron a ese "grupo otro" de la comunidad LGBTI, todavía segregada muchas veces a pesar de los esfuerzos y el activismo porque la diversidad, en su amplio sentido, sea aceptada. Si tiene dudas de ello tan solo siga las fuertes polémicas que en stos días se han desatado en el cementerio de Mariano Comense, en Como, Italia, debido a la tumba de Carlo Annoni, quien fuese enfermero y activista de los derechos del colectivo LGTB (lesbianas, gays, transexuales y bisexuales). ¿El motivo? Pues por el mero hecho de que la familia de Annoni y su viudo decidieron una lápida colorida para su tumba porque, según alegan, Carlo quería "algo que hablara de la vida y la dicha del amor". Algo que para quienes vistan el cementerio, nada tiene de alegre, sino que califican este acto como una vulgar atrocidad.

“Sin discriminar por género, pero esa tumba es un golpe a la vista. Es prácticamente un insulto para el resto de muertos y los seres queridos que los visitan en el cementerio", dijoAndrea Ballabio, un consejero local del partido Forza Italia en un comentario totalmente desacertado que desató de inmediato la furia de los amigos y seres quedridos de Annoni se hizo evidente. Acaso el "homofóbico" político quiere establecer un "plan de colores" que regule la apariencia de las tumbas del cementerio, comentaron.

Este conflicto expone una división entre el respeto por los muertos y lo que eso significa en concreto. Para algunos, un mausoleo con los colores del arcoíris puede ser demasiado ostentoso. ¿Pero es razonable prohibirlos? ¿No podemos acaso elegir cómo honrar a nuestros seres queridos? ¿Cuál es el color correcto para una tumba?

Parece que todo está según el prisma con que se mire; pues en países como México, la población recuerda a quienes ya no están entre ellos en una celebración de música y color que dura tres días: el famoso Día de los Muertos. En ocasiones, las tumbas se adornan con caléndula y los mercados se llenan de golosinas con formas de calaveras, demonios y ataúdes. La gente sale a las calles, inunda los cementerios con alegría, les ofrendan comida, y el ritual más colorido no puede ser. Por otra parte, en Ghana, la moda post mortem es más atrevida. Asimismo, en Accra, la capital, se hallan "ataúdes de fantasía" de formas extraordinarias que incluyen águilas, jeeps, cacao y mujeres con escasa vestimenta.

Para Douglas Davies, director del Centro de Estudios sobre la Vida y la Muerte de la Universidad de Durham el significado está en que, cuando la gente quiere algo más colorido, le suele costar más caro y difícil de conseguir; y no se puede negar que llevar de algún modo el estilo de vida a un "estilo de muerte" y plasmarlo en tu tumba es una tendencia que cada vez crece más", explicó. Puede que la lápida no le agrade a todos en Italia, pero su enfoque encaja perfectamente con las tradiciones que hay en otras partes del mundo, y si nos ponemos más pragmáticos, podemos decir que cada cual es libre de escoger cómo quiere que se le recuerde. Algo que ni las mentes más conservadoras tienen derecho a impedir.