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domingo, 26 de noviembre de 2017

Las incómodas dolencias de la Laringe

Por Janet Rios

La laringe es un órgano en forma de tubo ubicada en la región del cuello entre la faringe (garganta) y la tráquea (tubo de respiración). Es la que permite que podamos expresar todos los sonidos que querramos mediante el esqueleto de cartílago en el cual se ubican las cuerdas vocales que están resguardadas por un paramento de moco. Este órgano sufre en numerosas ocasiones de una enfermedad llamada laringitis, la cual consiste en una inflamación que es la que origina que nos quedemos sin voz o ronquera. Puede ser aguda o crónica las cuales son provocadas en muchas ocasiones por esforzar de más nuestras cuerdas vocales.

Otras dolencia de este órgano es la pérdida del tono y elasticidad de las cuerdas vocales, provocado por el paso de los años que afecta la calidad de la voz. Esto además puede originarse por la presencia prolongada de un tubo endotraqueal. Además también pueden estas presentes los llamados pólipos y nódulos causados por la exposición prolongada al tabaco, y por un mal uso de la voz. La más temida de las enfermedades, el cáncer de laringe, este puede ser de dos tipos según los especialistas, uno es el carcinoma de células escamosas y el otro carcinoma verrugoso, en ambos caos se encuentran asociados al tabaquismo.

Otra de las enfermedades más conocidas y no menos importante es el reflujo laringofaríngeo, esto se diagnostica cuando el ácido del estómago irrita y quema la laringe, hablando en nuestro idioma es lo que conocemos como acidez. Es importante aclarar que la causa más común de laringitis es provocada por algún tipo de virus, pero no es preciso dejar de destacar que las alergias, infección bacteriana, bronquitis, enfermedad por reflujo gastroesofágico, alguna lesión o por la presencia de irritantes y químicos pueden provocar que su enfermedad. La sintomatología varía en dependencia de la gravedad y sus causas. Una de las manisfestaciones más comunes es el deterioro de la voz, la cual puede llegar hasta su pérdida total.

Entre sus complicaciones, merece destacarse que si la causa de la laringitis es la parálisis de las cuerdas vocales, el mecanismo de la deglución también puede verse afectado, y las partículas de comida pueden entrar en la laringe y los pulmones, y provocar tos. Este proceso también puede conducir a la neumonía y sus síntomas asociados (fiebre, dificultad para respirar) cuando el alimento se aspira profundamente en los pulmones y causa irritación e inflamación del tejido pulmonar.

Si se presentan muy seguido el reflujo gastroesofágico pueden producirse ciertas cantidades de ácido las cuales puede que se dirijan un poco más allá de la laringe inflamada y entren en los pulmones, causando neumonía recurrente o bronquitis. Si es cierto que en es muy prudente acudir al médico cuando presentamos algún problema de esta índole, existen alivios naturales que nos ayudan a aminorar tales efectos. A continuación presentamos algunos remedios que ayudan a aliviar esta condición; pero antes de ponerlos en práctica conviene consultar con el médico de la familia.

Se asegura que la cebolla es un alimento eficaz para la inflamación de laringe. puede preparar cortando cuatro cebollas y cocinarlas a fuego lento en un litro de agua hasta obtener una consistencia espesa algo muy parecido a un jarabe. Con esta sustancia se coloca cinco cucharadas de la preparación en un vaso con agua tibia, agregar una cucharada de miel y unas gotas de jugo de limón y lo bebes cerca de tres veces al día.Otra opción es en un litro de agua hervir varias rodajas finas de jengibre fresco, luego se cuela, lo dejas enfriar y bebes el líquido resultante varias veces al día. Este jugo suaviza las paredes de la mucosa, alivia el dolor y la inflamación.

Muchos decimos que el limón no es un buen amigo en estos casos, pero lo cierto es que estamos en un error. Este es capaz de matar las bacterias y aliviar diversos síntomas de la laringitis. Para ello preparar un jugo de limón, agregar una pizca de sal y agua tibia. Es muy importante que no lo iongieras, solo realiza gárgaras. Otro ejemplo de remedio casero es el eucalipto, sus propiedades antimicrobianas lo convierten en una de las maneras más efectivas de aliviar el dolor. Su preparación consiste en añadir unas gotas de aceite en una cacerola con agua hirviendo, cubrir la cabeza con una toalla e inhalar el vapor durante 10 minutos. Esto se suele repetir dos veces al día.

Es importante aclarar que estos remedios no sustituyen los medicamentos orientados por un especialista pero lo cierto es que ayudan a pasar los incómodos malestaresz de est enfermedad.