¿Por qué Uber desembolsará 5 millones para combatir el abuso sexual?
La conocida empresa internacional de transporte privado oline, Uber, ha declarado que destinará 5 millones de dólares a la lucha contra el abuso sexual y el acoso tanto dentro como fuera de la compañía. La medida ha sido adoptada luego de que la ex ingeniera, Susan Flower hiciera pública una denuncia de casos de acoso sexual y de sexismo en la empresa. Reflexionando sobre un año muy, muy extraño en Uber fue el texto que reunió sus experiencias en este empleo y que provocó nada menos que fueran despedidos 20 empleados y que Travis Kalanick viera el final de sus días como CEO.
Aunque Uber ha tratado de dejar toda esa historia y la mala publicidad que ha traído aparejada en la página anterior, la cosa no le ha resultado tan fácil. Pues ahora el escándalo llegará también a la gran pantalla cuando se estrene la cinta Disruptors, producida por GoodUniverse y en la que se ahondará en detalles alrededor de las denuncias de Flower. Mientras, se ha centrado en anunciar qué hará con sus 5 millones destinados a convertir su empresa y el mundo en un espacio más seguro para las mujeres. Entre las acciones se encuentran los cursos de educación contra la violencia sexual para conductores y empleados en general. También comenzarán a colaborar con organizaciones como la Red Nacional para Eliminar la Violencia Doméstica, A CALL TO MEN, NO MORE, Casa de Esperanza, entre otras.
"Nuestro compromiso va encaminado a utilizar la visibilidad y el alcance global de Uber como plataforma para concientizar sobre la violencia doméstica y la prevención del asalto sexual a millones de personas alrededor del mundo", señaló en un comunicado TraceyBreeden, líder de comunicaciones de seguridad de la compañía y ex detective de policía. Y parece que van muy en serio en esto de llegar a todos, pues hasta los altos cargos de la compañía se han visto involucrados en acciones de capacitación. Un ejemplo de ellos fue el curso impartido por la Red Nacional para Eliminar la Violencia Doméstica y la Alianza Nacional para Terminar con la Violencia Sexual, a los altos cargos de Uber, donde se les enseña a manejar casos de acoso y agresión en el trabajo.
La tecnología no quedará fuera del presupuesto, pues, según Uber, aumentarán la seguridad de los trabajadores y los usuarios. Además del seguimiento por GPS, perfeccionarán el servicio de soporte las 24 horas y la información que se aporta sobre conductor asignado. ¿Suficiente todo esto para combatir el acoso y las prácticas sexistas? ¿Efectivo? Por supuesto que se necesita más que 5 millones para erradicar un flagelo que se encuentra transversalizado en todas las esferas de nuestra vida social, muchas veces de forma camuflada. Y de bien poco servirán si esta repentina “conciencia de género” de Uber no se mantiene en el tiempo y es solo un esfuerzo por limpiar su nombre tras el escándalo provocado por Susan Flower.
