Un paso de cebra con efecto 3D
Con cada año que pasa, el número de muertes en la vía en casi todos los países aumenta y no hay muchas maneras de evitar estas cuestiones a pesar de las leyes de tránsito. Se necesitan, definitivamente, medidas que logren regular la velocidad en la carretera, que aunque son ley en casi todos los lugares, muchas veces se incumplen y provocan accidentes a veces de proporciones catastróficas. Pero el paso adelante lo ha dado el pequeño pueblo pescador de Ísafjörður, en Islandia, donde ha surgido, casi literalmente, una nueva forma para reducir la velocidad de los vehículos por la carretera y asegurar la vida y la seguridad de los peatones y chóferes. Se trata de un paso de cebra que tiene un efecto 3D por medio de una ilusión óptica inteligentemente detallada que desde lejos le informa al conductor que debe disminuir la velocidad del auto y da una sensación de más seguridad a quienes lo transitan tiene el protagonismo en las calles del pueblo.
Siguiendo ese planteamiento de que mediante el uso y el desarrollo de la ciencia y la tecnología, muchas cuestiones del diario obtienen rápidas y eficientes soluciones, sabemos que cada día en la sociedad actual surgen nuevos descubrimientos, muchas veces relacionados a la mayoría de las esferas de desarrollo social que no solamente se vinculan a hechos pasados relacionados con la historia, las leyendas y los mitos que abundan en la Tierra, sino que van hasta encontrar respuestas a las situaciones más sencillas que garantizan mayor comodidad y un mejor estilo de vida a las personas y que sobre todo, resuelven cuestiones claves para mejorar el estilo social y las exigencias claves de mundo de hoy. Sabemos que son muchos los problemas que han quedado resueltos actualmente debido a avances tecnológicos que han permitido descubrir pistas y pruebas que muestran un creciente desarrollo global.
Hay no obstante, numerosas cuestiones que preocupan a la sociedad actual o al menos a esa parte que aún toma en cuenta los males que afectan a otros y que sabe que, si no se toman acciones rápidas, se cobrarán cada vez más vidas en todo el mundo. Los accidentes de tránsito representan un ejemplo claro, aunque constituyen sucesos tan usuales que ya no se toman demasiado en cuenta. El problema radica en que, con cada año que pasa, el número de muertes en la vía en casi todos los países aumenta y no hay muchas maneras de evitar estas cuestiones a pesar de las leyes de tránsito. Se necesitan, definitivamente, medidas que logren regular la velocidad en la carretera, que aunque son ley en casi todos los lugares, muchas veces se incumplen y provocan accidentes a veces de proporciones catastróficas.
Pero el paso adelante lo ha dado el pequeño pueblo pescador de Ísafjörður, en Islandia, donde ha surgido, casi literalmente, una nueva forma para reducir la velocidad de los vehículos por la carretera y asegurar la vida y la seguridad de los peatones y chóferes. Un paso de cebra que tiene un efecto 3D por medio de una ilusión óptica inteligentemente detallada que desde lejos le informa al conductor que debe disminuir la velocidad del auto y da una sensación de más seguridad a quienes lo transitan tiene el protagonismo en las calles del pueblo.
Este innovador diseño e cebra además de práctico y útil, también es artístico y creativo, pues no solo brinda a los viandantes la sensación de caminar sobre el aire en líneas transparentes, sino que también, y sobre todo, llama la atención de los conductores de vehículos, quienes seguramente deberán reducir su velocidad cuando logren vislumbrar este paso de peatones que parece levitar en el aire desde varios metros de distancia.
El comisario de Medio Ambiente de Islandia, Ralf Trylla, fue quien ideó el proyecto y solicitó la colocación de esta idea en Ísafjörður, fndamentalmente, tras ver un proyecto similar en Nueva Dehli, India, donde la afluencia de peatones a veces puede crear accidentes cuando los coches vienen a gran velocidad e igualmente, cargados de personas. Con la ayuda de la compañía de pintura callejera Vegmálun GÍH, se ha podido hacer realidad en el pequeño pueblo de Islandia este tipo de protección contra accidentes automovilísticos.
El mismo responsable islandés afirma que el límite de velocidad de las calles de Ísafjörður es de 30 kilómetros por hora, pero que se sabe que es un número que poca gente respetay por ello el alto número de accidentes en las calles estrechas. Él y su equipo trabajan, desde hace ya un tiempo, en la búsqueda y puesta en práctica de otras soluciones para complementar el efecto visual de este paso de cebra.
