Enviar por email

tu nombre: email destino: mensaje:
Nombre de Usuario: Email: Contraseña: Confirmar Contraseña:
Entra con
Confirmando registro ...

Edita tu perfil:

Usuario:
País: Población: Provincia:
Género: Cumpleaños:
Email: Web:
Como te describes:
Contraseña: Nueva contraseña: Repite contraseña:

domingo, 3 de diciembre de 2017

Entrenar la mente para prevenir la demencia

Por Jacky

Un estudio financiado por los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos informó que los adultos mayores que probaron un nuevo programa de entrenamiento cerebral tenían menos propensión a desarrollar demencia más adelante, en lo que se considera un hito. Este descubrimiento es considerado un hito, pues como explicó el autor del estudio, Jerri Edwards, todo el que tenga un cerebro está en riesgo de demencia, pero este es el primer tratamiento que se estudia en un ensayo clínico y que plantea una diferencia. El programa, llamado BrainHQ, fue desarrollado también por Karlene Ball de la Universidad de Alabama, y por Dan Roenker, de la Universidad del Oeste de Kentucky.

 

La demencia es la pérdida progresiva de las funciones cognitivas por daños o desórdenes cerebrales. La causa más común de demencia es la enfermedad de Alzheimer, que acapara entre un 60 y un 70 por ciento de todos los casos de ese padecimiento. Desde el 2012 es reconocida por la OMS como una prioridad de salud pública y es que, según estadísticas, entre un 5 y un 8 por ciento de la población mundial de más de 60 años sufre la enfermedad. Es por ello que los estudios para paliarla o evitar sus efectos tienen tanta relevancia.

En ese sentido, un estudio financiado por los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos informó que los adultos mayores que probaron un nuevo programa de entrenamiento cerebral tenían menos propensión a desarrollar demencia más adelante, en lo que se considera un hito.

Este descubrimiento es considerado un hito, pues como explicó el autor del estudio, Jerri Edwards, todo el que tenga un cerebro está en riesgo de demencia, pero este es el primer tratamiento que se estudia en un ensayo clínico y que plantea una diferencia. El programa, llamado BrainHQ, fue desarrollado también por Karlene Ball de la Universidad de Alabama, y por Dan Roenker, de la Universidad del Oeste de Kentucky.

El mismo busca acelerar el pensamiento mediante la asignación a las personas mayores de la tarea de distinguir entre una serie de objetos que cambian constantemente de forma en una pantalla de computadora, en el centro y en la periferia de la visión; proceso que se va acelerando gradualmente, haciendo que la tarea sea cada vez más difícil. Este procedimiento busca mejorar la capacidad de la persona de identificar rápida y de manera precisa los objetos.

El estudio tomó como muestra a más de 2800 adultos mayores y determinó que en un periodo de 10 años, la aceleración del procesamiento del pensamiento disminuyó en casi un 30 por ciento el riesgo de demencia, en comparación con los que no recibieron el entrenamiento.

Para la investigación se dividieron a las personas mayores libres de demencia de a partir de 65 años en 4 grupos. Uno de ellos no recibió entrenamiento cerebral de ningún tipo. Los 3 otros grupos, durante un periodo de 6 semanas, se sometieron a al menos 10 sesiones de diferentes entrenamientos cerebrales con una duración de 60 a 75 minutos cada una. También, algunos recibieron sesiones adicionales de entrenamiento además de las 6 semanas.

Un grupo recibió consejos sobre cómo mejorar sus habilidades de memoria verbal, y un segundo grupo sobre estrategias para mejorar la capacidad de razonar y resolver problemas. Mientras, el tercer grupo cumplió el programa computarizado de aceleración del procesamiento del pensamiento.

Luego de este proceso, los investigadores hallaron que ni el entrenamiento de la memoria ni el del razonamiento parecieron disminuir el riesgo de demencia a largo plazo. Pero lo relevante fue que descubrieron que el entrenamiento de aceleración del procesamiento del pensamiento aparentemente disminuyó el riesgo de demencia en un 29 por ciento a lo largo de 10 años.

De hecho, en adición, a mayor número de sesiones de entrenamiento de la velocidad, más bajo era el riesgo de demencia en lo adelante. Según los datos, entre los adultos mayores que tuvieron 15 o más de esas sesiones, considerando un periodo 10 años, el riesgo de demencia fue de apenas un 5.9 por ciento. En comparación con un riesgo de cerca de 10 por ciento determinado en los que pasaron por el entrenamiento de la memoria o el razonamiento, mientras que los que no tuvieron ningún entrenamiento tuvieron un riesgo de casi un 11 por ciento.

Como refirió el autor del estudio, Edwards, es importante comprender que esta intervención no es un juego, que no es solo hacer algo en la computadora, sino que es un programa de entrenamiento muy específico que muestra estos beneficios.

En ese sentido, el director asistente del centro de Envejecimiento Cognitivo y Memoria de la Universidad de Florida, Adam Woods, sugirió que aunque los hallazgos son extremadamente emocionantes, hay que tener presente no todos los entrenamientos cognitivos son iguales, pues no todos tienen el potencial de ralentizar el inicio de la demencia.

Pero añadió que este estudio plantea con claridad que un tipo específico de entrenamiento mostró ese efecto, pues el hecho de que un programa computarizado de entrenamiento cognitivo de la velocidad del procesamiento tenga el potencial de afectar el momento de inicio de la demencia es un hallazgo increíblemente importante que podría brindar esperanzas a los que están preocupados por desarrollarla a una edad avanzada.