Insultar a Iceta pasa factura
Los insultos que Jordi Hernández Borrell vertió sobre el candidato del Partido Socialista de Cataluña para las próximas elecciones del 21 de diciembre, Miquel Iceta, le han pasado factura. Hernández Borrell, director del Instituto de Nanociencia y Nanotecnología de la Universidad de Barcelona (UB) ha dimitido a causa de sus palabras sobre las que este mismo se ha retractado a través de la red social Twitter. “Repugnante”, “impostor” o “esfínteres dilatados” fueron algunas de las perlas que Hernández Borrell dijo sobre Iceta.
Las redes sociales pueden jugar malas pasadas y más aún si se usan de manera indebida. Los insultos y las palabras malsonantes gustan poco a quienes vigilan estas redes y, menos aún, sobre quien van dirigidos tales halagos. Hay que cuidar mucho lo que se dice y, quizás, reservar la opinión más personal para ambientes más caseros. Algo que no pensó dos veces Jordi Hernández Borrell, director del Instituto de Nanociencia y Nanotecnología de la Universidad de Barcelona (UB). Su crítica hacia el dirigente del Partido Socialista de Cataluña (PSC) y candidato a las próximas elecciones autonómicas del día 21 de diciembre, Miquel Iceta, le han hecho pagar un precio elevado.
Iceta no sale bien parado en las palabras de Hernández Borrell que le tacha de “ser repugnante”, “demagogo” e “impostor” que tiene "los esfínteres dilatados y baila al son de Ciudadanos y del PP”. Toda la bancada socialista salió entonces en apoyo de Iceta quien ha preferido desmarcase de las palabras de Hernández Borrell.
Unos comentarios que levantaron ampollas entre el colectivo LGTBI del PSC que consiguió más de 8.400 firmas, en menos de 24 horas, para echar al docente. El mismo ha presentado este lunes su dimisión que ya ha sido aceptada por el rector de la UB, Joan Elias, quien ya había tachado los comentarios de Hernández Borrell como “inaceptables”.
Además, Hernández Borrell ha querido disculparse también a través de su perfil oficial en Twitter donde ha calificado de “desafortunado” su tuit y ha pedido”disculpas a todos y todas las personas que se ofendieron con razón. Especialmente a Miquel Iceta Llorens”. Así mismo, ha querido dejar claro que no es “homófobo, ni mucho menos”. Lo escrito fue “una metedura de pata” según el Hernández Borrell que la próxima vez seguro que se lo pensará dos veces antes de volver a soltar insultos tan a la ligera.
