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martes, 19 de diciembre de 2017

La basura electrónica, un problema del siglo XXI

Por Miss GD

Se sabe que estos artefactos tecnológicos tienen componentes que pueden dañar a miles de ecosistemas. En varios informes anteriores también se han dado a conocer cuáles son los países de América Latina que más basura electrónica producen. Datos de un estudio realizado por la Universidad de las Naciones Unidas en una colaboración con la Unión Internacional de Comunicaciones y la Asociación Internacional de Residuos Sólidos reflejan que los desperdicios de este tipo han ido en aumento con los años. Y es que en total, la basura electrónica generada en el planeta en el año 2016 sobrepasó los 44 millones de toneladas métricas, lo que sería como decir a más de 4 mil torres Eiffel de basura.

Y es que ya no basta con todos los daños que se le han infligido durante años al Medio Ambiente. Ahora el fenómeno más peligroso para la naturaleza se destapa, fundamentalmente en los países americanos. La categorizada como basura electrónica es un problema de esta era digital que afecta al medio ambiente y a nuestra salud. El término viene de aquellos adelantos tecnológicos que usamos tanto en nuestra vida actual, dígase de celulares, computadoras, impresoras, cámaras fotográficas y todos aquellos equipos electrónicos que al ser desechados se consideran como basura electrónica y está reprsentando un problema para nuestro planeta.

Se sabe que estos artefactos tecnológicos tienen componentes que pueden dañar a miles de ecosistemas. La también conocida como chatarra eléctrica es una de las consecuencias de este mundo digital y de la sociedad consumista de la información. Según datos del último Informe sobre Basura Electrónica de 2017 (Monitor Global E-waste 2017) en inglés, de Naciones Unidas, los frigoríficos, televisores, teléfonos y otros equipos que descartamos contienen sustancias que representan un riesgo para el medio ambiente y para la salud.

En varios informes anteriores también se han dado a conocer cuáles son los países de América Latina que más basura electrónica producen. Datos de un estudio realizado por la Universidad de las Naciones Unidas en una colaboración con la Unión Internacional de Comunicaciones y la Asociación Internacional de Residuos Sólidos reflejan que los desperdicios de este tipo han ido en aumento con los años. Y es que en total, la basura electrónica generada en el planeta en el año 2016 sobrepasó los 44 millones de toneladas métricas, lo que sería como decir a más de 4 mil torres Eiffel de basura.

Mientras más avanza la tecnología, más desechos electrónicos se producen, de hecho, estos aumentaron en un 8 por ciento en dos años y solo se recicló el 20 por ciento de la basura generada. Pero ahora y ante el feroz impacto de un cambio climático que afecta a todo el planeta, la ONU señala que cada vez más naciones están adoptando legislaciones al respecto del reciclaje y la sostenibilidad. Sobre el continente latinoamericano el organismo internacioal refiere que la región tiene mucho por hacer en esta materia, pues genera grandes cantidades de basura electrónica y además tiene bajos índices de reciclaje.

América Latina durante 2016, produjo 4,2 toneladas métricas con una media de 7,1 kilos de chatarra por habitante, con países que más basura electrónica generan por habitante como Uruguay, con 10,8 kg, Costa Rica 9,7 kg y Chile 8,7 kg. Y hablando en términos generales, los países latinoamericanos que más basura electrónica generaron son Brasil, (1,5 toneladas métricas), México con 1 tonelada métrica y Argentina con 0,4 toneladas métricas.

Los problemas de reciclaje y desarrollo sostenible se acrecientan en territorio latinoamericano y Para la ONU, según el informe de las Naciones Unidas, esta región tiene una carencia de regulación al respecto. De hecho, Solo siete países tienen leyes aprobadas para frenar la súper contaminación en esta región, dígase de Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México y Perú. Pero incluso estos mencionados se encuentran en un proceso muy inicial y necesitan realizar varias mejoras en sus legislaciones ambientales. En otros países también muy contaminantes como Argentina, Brasil, Panamá y Uruguay ahora solamente se está comenzando a hablar de abordar un marco legislativo que logre regular qué hacer con los aparatos electrónicos que se desechan.

Por fortuna, se ha creado una conciencia ambiental a nivel mundial que ha hecho que América Latina comience a incrementar la legislación requerida para lidiar con la basura electrónica aunque aún tiene que mejorar, según refieren las Naciones Unidas. El problema esencial radica especialmente en la abismal diferencia entre las grandes cantidades de basura que se generan y el porcentaje que se recicla, que no llega al 3 por ciento de media en la región. La mayoría de los países no tienen sistemas de reciclaje apropiados.