Más de 6.000 bomberos contra el fuego Thomas
Miles de bomberos estaban luchando contra uno de los incendios forestales más destructivos en la historia de California el lunes mientras avanzaba implacablemente por la costa del Pacífico y forzaba nuevas evacuaciones, según informó la agencia de Noticias AFP. Mientras se controlaba un incendio forestal cerca de Los Ángeles, los equipos de bomberos fueron re-desplegados para combatir esta otra zona al noroeste de la segunda ciudad más grande de Estados Unidos.
Aviones y helicópteros de ala fija ayudaron a casi 6 mil 400 bomberos que trataban de mantener el Thomas Fire lejos de las ciudades frente a la playa al sur de la histórica ciudad de Santa Bárbara, dijo el Departamento de Bomberos de California (Cal Fire). "Los fuertes vientos del noreste provocarán que el fuego amenace las áreas de la ciudad de Santa Bárbara", que tiene una población de 91,000 habitantes, dijo Cal Fire a la agencia.
Mientras, Eric Boldt, un meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional de Los Ángeles, dijo que no veía ningún respiro inmediato a las condiciones secas y ventosas que están alimentando el incendio. "Las condiciones son muy críticas", dijo Boldt. "Dado que no vemos ninguna precipitación durante las próximas dos semanas como mínimo, podría convertirse en el mayor incendio en la historia del estado".
El incendio Thomas ha quemado 230.500 acres (93.300 hectáreas) desde que estalló hace una semana, dijeron; lo cual hace que se convierta en el quinto incendio más grande en la historia del estado. Hasta el lunes por la tarde solo contenía un 15 por ciento. El incendio se extendió durante el fin de semana en el Bosque Nacional Los Padres, casi deshabitado, y amenazaba las localidades costeras de Montecito, Summerland y Carpinteria. Se levantaron órdenes de evacuación obligatorias para las ciudades del interior de Ojai y Santa Paula en el condado de Ventura, que ha sido el más afectado por el incendio de Thomas.
A pesar de la intensidad de los incendios que se extienden desde el norte de Los Ángeles hasta San Diego, las autoridades han reportado solo una muerte: una mujer de 70 años que murió en un accidente automovilístico mientras huía de un incendio. El gobernador de California, Jerry Brown, advirtió que el cambio climático significaba que el estado se estaba volviendo cada vez más vulnerable y que los incendios forestales se estaban convirtiendo en la "nueva normalidad". Brown ha sido uno de los críticos más expresivos de la decisión del presidente Donald Trump de sacar a Estados Unidos del acuerdo de París sobre el calentamiento global, y renovó sus ataques a la administración sobre su actitud hacia el cambio climático. Algo, que puede atentar contra la seguridad de los propios estadounidenses y que la Madre naturaleza no entiende.
