Venezuela pierde a Ana Enriqueta
El pueblo venezolano está de luto por la muerte de Ana Enriqueta Terán, una de las poetisas más destacadas de Latinoamérica en el siglo XX. La escritora, que murió el lunes en la ciudad venezolana de Valencia a la edad de 99 años, pertenece a la Generación del 18 y sus principales influencias fueron los clásicos españoles como Góngora y Garcilaso de la Vega, y los poetas franceses Rimbaud y Baudelaire más tarde.
En su cuenta de Twitter, el ministro de Cultura, Ernesto Villegas, dio la noticia y notó la durabilidad de sus poemas. "Acaba de fallecer en Valencia la poetisa Ana Enriqueta Terán (...) a la edad de 99 años. Su obra y trayectoria quedan como ejemplo para las nuevas generaciones (...). ¡Honor y gloria!", dijo a través de su cuenta en Twitter. ' el escribio. La obra de Terán, referencia de la literatura venezolana e hispanoamericana, estuvo más que influenciada por reconocidos autores como Luis de Gógora, además de Garcilaso de la Vega, Artur Rimbaud y el conocido Charles Baudelaire.
La poetisa siempre sintió gran afinidad por la izquierda, por ese motivo no fue sino hasta 1989 cuando le fue otorgado el prestigiosos Premio Nacional de Literatura, galardón que merecía desde tiempo atrás. Entre sus escritos más destacados están, por ejemplo, los poemas Casa de hablas y Piedra de habla, así como los poemas selectos de los libros Al norte de la sangre (1946), Testimonio de 1954, el conocido De bosque a bosque (1970) y su Libro de los oficios (1975).
Ana Enriqueta Terán nació el 4 de mayo de 1918 en una hacienda de caña en Valera, estado Trujillo y fue, sin dudas, una figura destacada, su obra se considera como símbolo de nostalgia, amor, también sensualidad, pero sobre todo una imagen perfecta del paisajismo andino. Se conoce que vivió durante años en una pequeña casa en Jajó. Allí tenía un taller con diez costureras entrenadas por ella. Según palabras de la escritora, su esencia estaba en la poesía.
