Rusia, objetivo terrorista
En la madrugada del 5 al 6 de enero militares rusos lograron evitar ataques de exactamente trece vehículos no tripulados contra las bases militares rusas Jmeimmim y Tartus en Siria, según ha informado este lunes el Ministerio ruso de Defensa mediante un comunicado. los militares rusos lograron destruir siete drones y se apoderaron del resto.
El ministerio ruso ha precisado que diez drones se acercaban a la base de Jmeimim, y que otros tres lo hicieron a la naval de Tartus. Es la primera vez que los terroristas lanzan un ataque masivo con drones, que fueron lanzados desde una distancia de más de 50 kilómetros y fueron utilizadas modernas tecnologías de apuntamiento a través del GPS, según informa el organismo. Los ataques, al parecer, no causaron ningún daño en las instalaciones militares rusas. Con respecto a la naturaleza de los drones, el Ministerio ruso de Defensa ha afirmado que, posteriormente a su análisis, han llegado a la conclusión de que sus soluciones técnicas "solo podían ser originarias de un país con altas capacidades tecnológicas" y que los terroristas pueden ahora lanzar ataques desde más de 100 metros. De igual forma, un ataque así podría ser efectuado en cualquier país del mundo, afirma el organismo ruso.
Otros incidentes recientes con militares rusos en Siria durante la pasada noche vieja, la base de Jmeimim, que ahora también fue atacada, sufrió un embestida repentina con morteros a mano de un grupo de combatientes de sabotaje móvil cobrando la vida de dos militares, ha informado el Ministerio ruso de Defensa, que negó la veracidad de informaciones difundidas por algunos medios que hablaban de la "destrucción" de siete aviones rusos en la base aérea.
Además, las autoridades militares rusas anunciaron la pérdida ese mismo 31 de diciembre de un helicóptero Mi-24 en Siria, aunque no en la base militar Jmeimim. La aeronave se estrelló por un fallo técnico a unos 15 kilómetros del aeródromo de Hama, en el accidente perdieron la vida sus dos pilotos. Asimismo, los sistemas antiaéreos rusos Pántsir-S1 repelieron el pasado 27 de diciembre un ataque contra la base de Jmeimim, interceptando al menos dos cohetes. A pesar del hostigamiento a los militares rusos en Siria, su mandatario ha agradecido a su homólogo ruso por la participación "eficaz" de Moscú en la lucha antiterrorista en su país.
