Estados Unidos y Brasil, juntos para lanzar cohetes
Con el objetivo de que los estadounidenses tengan la posibilidad de lanzar cohetes espaciales desde la base de Alcántara (estado brasileño de Maranhao, noreste), EEUU y Brasil retomaron este martes las negociaciones sobre el tema. Así lo confirmó Aloysio Nunes, actual ministro de Relaciones Exteriores del país sudamericano. ¿Cómo proseguirá un asunto que lleva años de parálisis?
Nunes dijo que la parte brasileña y su par norteamericana, están de acuerdo en retomar las negociaciones a fin de la salvaguarda tecnológica. “La vuelta a las negociaciones de este acuerdo es bastante positiva para Brasil", dijo el canciller, de acuerdo con el diario Valor Económico.
Estas negociaciones, no obstante, llevaban años de parálisis desde que en el 2002 la administración estadounidense barajó la posibilidad de lanzar cohetes desde Alcántara. Para ello puso condiciones: debía preservar de forma total su información tecnológica. Al Congreso Nacional brasileño no le gustó en lo absoluto la idea y echó atrás todo trato.
Eran tiempos en que la izquierda encaminaba al gigante sudamericano. Ahora, con una administración derechista encabezada por el presidente Michel Temer, la locomotora verde amarelo actúa de manera distinta. Temer presentó una contrapropuesta a Washington que incluía la protección de la propiedad intelectual de los estadounidenses, lo cual explicó el ministro Nunes al exponer este martes sus consideraciones sobre el tratado en curso. “Ellos (los estadounidenses) quieren la defensa legítima de sus estrategias comerciales, y hemos hablado de cómo aplicar esa defensa sin ninguna violación a nuestra soberanía”, aseveró Nunes luego de reunirse con Mike Pompeo, actual secretario de Estado de EEUU.
De la conversación emergieron otras informaciones relevantes, pero hasta ahora, asegura el canciller no hay un plazo para el posible uso de la base por parte de EEUU y que el acuerdo sería bueno para Brasil, que recibiría recursos y formación de personal gracias a la asociación con los estadounidenses.
Habría que ver si la razón en su posicionamiento la tiene la actual presidencia brasileña, o la del 2002. De cualquier manera, el Brasil que tanto creciera con Lula a la cabeza, ha ido de revés, de modo que la propia ciudadanía está pidiendo de vuelta a la silla presidencial al hombre que les dio esperanza a través de acciones concretas.
