Macri, al lado de las familias de los desaparecidos
A seis días de la desaparición del submarino argentino ARA San Juan, sin señal desde el pasado miércoles con 44 tripulantes a bordo en el Atlántico Sur, la búsqueda continúa, a pesar de que el oxígeno restante en el artefacto está a punto de terminar. En la noche de ayer un avión detectó la luz de dos bengalas, ahora se conoce que no provenía de ese submarino y están rastreando de dónde provino entonces. También la Armada de la nación sudamericana descartó que las siete llamadas satelitales captadas este sábado no eran salidas del teléfono del ARA San Juan. Ya diez países se suman a la ayuda.
Casi una semana ha transcurrido desde el último contacto que estableció el submarino argentino ARA San Juan, que había partido para una travesía desde Ushuaia hasta la ciudad de Mar del Plata.
Hoy, el mandatario argentino Mauricio Macri, durante su intervención en la apertura del Encuentro Regional de las Américas de la Alianza para el Gobierno Abierto 2017, afirmó que continúan desplegando todos los medios posibles para encontrar el submarino. Macri también envió ‘en estas horas difíciles’ su apoyo a los familiares de las 44 personas a bordo. El lunes el presidente se había reunido con ellos en la Base Naval de Mar del Plata.
Sin embargo, ayer también trascendió que el vocero de la Armada de la nación sudamericana, Enrique Balbi advirtió que a la tripulación del ARA San juan solamente le queda un día de supervivencia bajo el mar, eso en uno de los peores casos. Según el funcionario ‘en condiciones normales, el submarino puede pasar 90 días sin ayuda externa, en cuanto a combustible, agua y oxígeno. Esto es, haciendo esnórquel para renovar el aire y cargar las baterías. Esto se hace una vez por día, o cada dos o hasta tres días’.
Balbi explicó igualmente que si el submarino está a nivel de superficie debido a una avería no tendría entonces problemas de oxígeno, y en cuanto a los alimentos apuntó que se llevaron para 10 días, pero racionalizándolos durarían hasta por un mes.
Hace 32 años, en una fría tarde del 18 de noviembre de 1982, durante la ceremonia de entrega del submarino efectuada en una ciudad alemana, el capitán Carlos Zavalla había expresado ‘Pido al Señor que proteja siempre al submarino ARA San Juan y sus tripulantes’. El ARA San Juan tiene 66 metros de eslora y 7 de manga, además cuenta con 960 baterías que se alimentan de motores diésel y es del tipo TR-1700.
