La tensión política no se ve, pero se nota
Tanto si el Gobierno quiere como si no, ha dicho Carles Puigdemont, va a convocar un referéndum para la independencia. Si todo marcha bien en Cataluña, lo celebraría en Septiembre. El presidente de la Generalitat catalana dio ayer una conferencia abierta al público, donde 12 personas tuvieron la suerte de poder hacerle una pregunta. “Es lo que quiere la mayoría de la gente”, sostuvo, y negó haber hecho ningún tipo de pacto con el Gobierno central a espaldas de la ciudadanía para solucionar el asunto.
De los detalles del referéndum solo ha dejado entrever dos puntos. En primer lugar, podrían votar aquellos inscritos en el censo de las últimas elecciones, lo que deja fuera a los extranjeros, por ejemplo. Lo ha justificado diciendo que se tienen que cumplir los “estándares internacionales” si se quiere hacer “bien”. En segundo lugar, y en el hipotético caso de que saliese el “sí”, la Generalitat tendría que incorporar a su nuevo ordenamiento jurídico los más de 3.300 tratados internacionales que España ha suscrito.
Respecto a un futuro encuentro con Mariano Rajoy, aseguró que por ambas partes hay una voluntad para el encuentro y el diálogo, y que los equipos de ambos están trabajando para hacer cuadrar las agendas. Por otro lado, también remarcó que los diplomáticos de otros países “no entienden el inmovilismo del Gobierno español”. La relación con sus socios de Parlamento fue otro punto clave del debate: al parecer, el tema de los Presupuestos no está cerrado del todo, pero están trabajando en ello y se prevé que para esta semana cierren un acuerdo. A cambio, la CUP consigue la aprobación del Gobern de implanta una Renta Básica Garantizada, el modelo de la cual es motivo de discordia entre ambos grupos parlamentarios.
Puigdemont ha asegurado que no repetiría como candidato a la presidencia en unas hipotéticas elecciones. Los rumores que corren dicen que se presentaría como cabeza de lista por Girona, mientras que Artur Mas encabezaría la lista de Barcelona. El partido se ha de preparar para hacer frente al auge de Esquerra Republicana, que en los últimos sondeos está subiendo como la espuma, y como no hay intención de repetir la coalición de Junts Pel Sí, Oriol Junqueras tiene cada vez más posibilidades de ser el próximo president.