¿Paranoias de Erdogan?
Sigue la limpieza ideológica en Turquía. 227 jueces y fiscales han sido destituidos por estar “presuntamente” relacionados con Fetulá Gülen, el clérigo que Recep Tayyip Erdogan cree que fue el artífice del intento de golpe de estado que se intentó llevar el verano de 2016. Este nuevo golpe contra la presunta oposición del presidente suma ya 3.886 jueces y fiscales destituidos de sus puestos de trabajo, y un total de más de 100.000 funcionarios pertenecientes al Ejército, a la policía, además de los jurídicos.
También en Turquía, ayer empezó el juicio al “equipo de asesinos”. Presuntamente, son 47 las personas que durante el intento de golpe de estado habían planeado cargarse al presidente Erdogan. Debido al alto número de acusados el juicio se celebra en la Cámara de Comercio de la ciudad, y cuenta con muchas medidas de seguridad. El fiscal que lleva el caso lo ha bautizado como “histórico” ya que se trata del único caso donde el demandante es el mismo presidente del país. Según Al-Jazeera, la noche del golpe de estado dos policías que hacían guardia en el hotel donde se alojaba Erdogan fueron asesinados, y el mismo presidente, en declaraciones a la televisión estatal, dijo que había escapado con vida por los pelos cuando el hotel fue bombardeado tan solo 15 minutos después de abandonar el edificio.
Desde que se descubrió la presunta trama hasta ayer, que empezó el juicio, los acusados han estado en prisión. Seguramente también pasarán allí todo el tiempo que dure el juicio – que está previsto extenderse a lo largo de todo el año.
