¡Robocop es real!
Para todos los que crecimos viendo películas que incluían a policías robotizados del futuro.
Hace ya varios años que la historia de Robocop se hizo "viral" en el mundo. Un policía sufría grandes daños en su cuerpo y, producto del desarrollo de una investigación científica, lo regeneraban mediante la utilización de componentes computarizados, convirtiéndolo en una especie de "robot" humano, con habilidades especiales.
Alrededor del eje temático de ese comic-videojuego-película, existen importantes debates acerca de temas tan importantes como la seguridad, la ética y el desarrollo tecnológico. Estos debates se intensifican ante la noticia de que, lo que pudiera sonar a pura ciencia-ficción, se está convirtiendo en una realidad.
En la ciudad de Dubái, perteneciente a los Emiratos Árabes Unidos, durante la Expo de Seguridad e Información para el Golfo (GISEC por sus siglas en inglés) se presentó hace unos días un prototipo de un policía robotizado, que se supone que tendrá las funciones de asistencia a las labores de patrullaje y ayuda. Sí, tan increíble como pudiera parecer. Desde hace dos años se había hecho el anuncio, pero ya parece un hecho casi consumado.
Ahora bien, ¿cuáles serían las ventajas y las desventajas de introducir este tipo de tecnología tan avanzada? Esta es una pregunta de necesaria formulación para analizar el tema, especialmente teniendo en cuenta los miles de millones de dólares que se requieren para costear semejante inversión. Claro, en el caso de Dubái, el tema económico no representa un problema mayúsculo, pero aun así, cabe analizar cuáles son los elementos más positivos de estos policías robots y cuales podrían representar un inconveniente.
El nuevo policía tendría inteligencia artificial y cuenta con una amplia gama de opciones interactivas. Entre ellas se enumeran sensores para las expresiones faciales y las emociones, lo que los hace capaces de detectar el estado de ánimo de la persona. Además, puede comunicarse en seis idiomas y cambiar su expresión facial para hacer sentir mejor a sus interlocutores. Estará equipado con cámaras y micrófonos para su monitoreo, y al mismo tiempo será todo un espectáculo para los transeúntes de la ciudad, pudiendo convertirse incluso en una atracción turística. Por último, podría decirse que el robot está diseñado para ser siempre amable con las personas, y ser servicial en todo cuanto esté a su alcance.
Hasta aquí todo suena muy interesante. Sin embargo, hay un grupo importante de elementos que deberían ser tenidos en cuenta antes de aplaudir la genial aparición de "robocops" en nuestra vida cotidiana. Quienes hayan visto la más reciente versión de la película, estrenada en 2014, recordarán la escena inicial en la que máquinas con Inteligencia Artificial atacan a un niño que intentaba defender a su familia, utilizando un cuchillo para atacar a un "monstruo" metálico de varias toneladas.
Sin ánimos de parecer extremistas ni adictos a la ciencia-ficción, habrá quienes mencione también otros libros y películas que describen como las máquinas van poco a poco apoderándose del control de nuestro planeta, y terminan dominando a los humanos. El hecho de que aparezcan policías robots en una ciudad del mundo podría ser el primer paso hacia ese temido futuro, por muy descabellado que esto pueda sonar. Además, aun cunado la ciencia está más desarrollada cada día, ¿quién garantiza que el nuevo policía no sea víctima de un ataque de hackers o un virus informático y termine haciendo acciones para las que no fue diseñado?
Sería utópico decir que iniciativas como esta se van a generalizar en todo el mundo, al menos en los próximos 30 o 40 años, pero nadie sabe hasta dónde nos llevaran los avances tecnológicos en el futuro. Siendo así, es válido cuestionarse si preferimos contar con un policía robotizado para garantizar nuestra seguridad, o si sería mejor ceñirnos a la idea de que un ser humano, con ideas, pero también con sentimientos, instintos y un desarrollo lógico, sea el encargado de velar por nuestra vida.