El ataque de un helicóptero enciende Venezuela
Tengan la seguridad de que más temprano que tarde vamos a capturar el helicóptero y a los que han hecho este ataque terrorista armado contra las instituciones del país, aseguró el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro. El jefe de Estado se refirió a una aeronave que en días pasados sobrevoló las sedes del Ministerio del Interior y el Tribunal Supremo de Justicia y lanzó granadas. Al respecto, el vicepresidente Tareck El Aissami anunció que el helicóptero fue encontrado en la localidad montañosa de Osma, en el estado costero de Vargas, a unos 50 kilómetros de Caracas. Nada se sabe de los pilotos.
Según los mensajes en Twitter de El Aissami, el aparato es un Airbus Bolkow Bo-105 del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas de la policía venezolana (CICPC). El mismo fue robado por Óscar Alberto Pérez, quien era inspector del CICPC. El sujeto publicó en las redes sociales un vídeo en el que dice que él y quienes le acompañaron eran guerreros de Dios que no pertenecían a ningún movimiento político.
Muchas son las incógnitas alrededor del hecho. Hay quienes se cuestionan el nivel de confiabilidad de los hombres de los aparatos del Estado venezolano. También existen criterios de que pudo ser un montaje. El caso es que el suceso echa más fuego al conflicto civil desatado en Venezuela a finales de abril.
Por otra parte, trascendió hoy que el Tribunal Supremo falló a favor de que el Defensor del Pueblo tenga facultades propias de la Fiscalía. El Tribunal Supremo de Justicia decide la semana próxima si la fiscal Luisa Ortega responde a juicio por lo que se le prohibió salir del país y se le congelaron sus cuentas. La decisión se tomó porque la fiscal se volvió crítica contra la Asamblea Nacional Constituyente convocada por Maduro.
Por lo pronto, el canciller venezolano, Samuel Moncada, calificó el suceso de atrocidad y un crimen de guerra y pidió a la comunidad internacional que denuncie la violencia política contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro y la Revolución Bolivariana en Venezuela. Maduro, a su vez, presentó el hecho como evidencia de los planes golpistas y desestabilizadores de ciertos sectores de la derecha venezolana que había venido denunciando repetidamente sin ofrecer pruebas.
La crisis sigue atizándose en esta nación sudamericana. Como resultado de la violencia, cinco jóvenes murieron ayer durante los llamados “trancazos” de la oposición. Al menos 80 personas han fallecido desde que estalló la crisis.