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viernes, 2 de junio de 2017

Evo Morales acusa al presidente de la OEA de derechista y opositor

Por Diana Lorenzo

Las redes sociales se han transformado en el escenario bélico entre Evo Morales, presidente de Bolivia, y Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA). Esta vez fue el mandatario andino quien acusó en su cuenta de Twitter al uruguayo Almagro, tildándole de perpetrador de una política similar al Plan Cóndor, una estrategia empleada por las dictaduras militares del cono sur para deshacerse de los principales líderes políticos. En un nuevo contexto de siglo XXI, la figura del uruguayo se considera por muchos como el agente facilitador de la hegemonía imperialista y contra las democracias latinoamericanas y caribeñas.

Según el jefe de Estado, el objetivo es eliminar políticamente a los presidentes de la izquierda latinoamericana, tal como se intentó en la década de los 70 por las dictaduras militares. Según Morales, el excanciller uruguayo, es una amenaza contra la paz de América, y encamina al organismo que dirige hacia la extinción. Asegura además que Almagro está obsesionado con Venezuela, y en contra de los principios del presidente Nicolás Maduro. Su fijación le ha hecho, según el presidente andino, dejar de mirar otras realidades también preocupantes "provocadas por golpistas corruptos", como la de Brasil.

Según sus tuits, la OEA es hoy una colonia de los Estados Unidos. Relacionado con ello, instó a los jefes de estado a distinguir al enemigo tanto dentro como fuera del país. En reiteradas ocasiones Evo ha criticado al presidente de la OEA por sus actitudes intrusivas en las democracias latinoamericanas y a favor de los intereses de Norteamérica. Así mismo, ante las actuales circunstancias, el mandatario insta a respetar la Carta constitutiva, que le declara como un organismo de paz, seguridad y democracia; aún cuando durante décadas la OEA ha sido justamente lo contrario.

Recientemente tuvo lugar una reunión de cancilleres organizado por el organismo internacional, que no contó con el apoyo ni aprobación de Caracas. Por tal motivo, Nicolás Maduro decidió salirse de sus filas. El cónclave concluyó sin decisión alguna sobre el país vecino, y será reprogramado antes de que tenga lugar el Congreso en junio próximo.

El Plan Cóndor fue un programa de inteligencia diseñado y coordinado por los servicios de seguridad de las dictaduras militares de Brasil, Argentina, Chile, Bolivia, Paraguay y Uruguay, en colaboración de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por ‎sus siglas en inglés) de EE.UU., para aniquilar a la izquierda opositora de la época.