La información, el caballo de batalla de las empresas del siglo XXI
En la actualidad, en los albores del siglo XXI, las tecnologías permiten hacer realidad el sueño de todos aquellos teóricos que preconizaron la urgencia y necesidad de idear nuevos sistemas, acordes con la producción masiva de documentación y con las necesidades de una nueva sociedad en la que el acceso y recuperación de la información son pilares fundamentales del desarrollo de la ciencia y tecnología. La idea de crear un sistema de Información técnica forma parte de un nuevo entramado económico, social y cultural. Se trata de la revolución de la información, la revolución de los ordenadores y la revolución de las comunicaciones.
Son todavía muchas las organizaciones que en la actualidad no han visualizado la necesidad de contar con un sistema de información capaz de seleccionar, almacenar, organizar, representar y diseminar la información generada y atesorada en estas. Los objetivos de los sistemas de información sosteniendo que el objetivo que persiguen estos sistemas es dar sentido a sus colecciones, facilitar el aprendizaje, contribuir a eliminar la memorización, y llenar cada vez más la brecha existente entre conceptos formales y la intuición, la teoría y la práctica. Así mismo, sin pretender abarcar todos los tipos de sistemas de información atendiendo a su rol y misión.
Estos tipos de sistemas responden a la satisfacción de necesidades de una organización o de un individuo o grupo. Por tanto, se diseñan para responder a objetivos concretos y en su operación, permanentemente se intenta comprobar el grado de eficiencia del mismo. Para Muñoz Cruz “un sistema de información es un conjunto de elementos o componentes relacionados con la información que interaccionan entre si para lograr un objetivo: facilitar y/o recuperar información.
Los sistemas de información para las Empresas están insertados dentro del ambiente organizacional. Estos sistemas se diseñan para servir a la organización, principalmente se orientan hacia la toma de decisiones y procuran controlar datos e informaciones internas y externas, que son de importancia para la organización.
Es tanta la cantidad de información interna que se genera dentro de la Empresa y tanta la que se obtiene del ambiente externo que los directivos no siempre saben qué hacer con ella, lo cual afecta la toma de decisiones. Por otra parte, las organizaciones se ven presionadas por la identificación, utilización, sociabilidad del conocimiento de los recursos humanos que va a constituir un factor crítico para la toma de decisiones y el posicionamiento de la organización en el mercado, por lo que se hace imprescindible también su gestión y utilización en función de la institución.
Siempre ha existido información, pero la introducción de las nuevas tecnologías de la información ha permitido, además de compartir la información en los distintos niveles de la Empresa, gestionar la gran cantidad de datos que se encuentran aislados en los distintos departamentos operacionales de la organización y en sus personas, lo que genera un conocimiento de indiscutible valor, que constituye una herramienta competitiva, clave para la toma de decisiones en las áreas directivas de las organizaciones.
Fuentes
