El camino de Bolivia en la educación
Bolivia se ha convertido en el segundo país de América Latina que más invierte en educación, solo por detrás de Cuba, con un 14 por ciento del presupuesto del Estado destinado a ese sector. Actualmente, la administración de Morales destina unos 2 mil millones de dólares anuales para ese campo, número se encuentra muy por encima de los 600 millones que se destinaban en el año 2000. Estos proyectos se ubican dentro de la Agenda Patriótica 2025 que consiste en un programa gubernamental que tiene como fin colocar a Bolivia a la cabeza del continente sudamericano en varios indicadores económicos y sociales, para lo cual es indispensable erradicar de manera absoluta o casi absoluta el analfabetismo.
El gobierno del presidente Evo Morales destinó más de 554 millones de dólares al pago del bono Juancito Pinto a estudiantes de primaria y secundaria con el objetivo de evitar la deserción escolar. Esta información fue publicada este 4 de julio por los ministerios de Educación y Finanzas de la nación andina. Según destacó el ministro de la Educación, Roberto Aguilar, ese conocido subsidio permitió incorporar más niños a las diferentes enseñanzas en los últimos 11 años. En las zonas urbanas la tasa de asistencia escolar de los menores entre los 6 y 11 años aumentó de un 94,9 a 97,7 por ciento. Mientras, en las zonas rurales ese indicador pasó de 92,9 a 96,8 por ciento.
El bono Juancito Pinto, por un valor de 200 bolivianos, que equivale a unos 28 dólares, se entrega todos los años a los estudiantes para estimular la matrícula en los centros educativos, la permanencia en los mismos y una satisfactoria culminación del año escolar. Desde el año 2006 el número de beneficiaros con ese programa de transferencia monetaria condicionada prácticamente se duplicó y aumentó de uno a más de dos millones de escolares. El presidente de la nación, Evo Morales, destaca que esta iniciativa ha contribuido en gran medida a reducir el abandono escolar. El mandatario sudamericano ha declarado en varias ocasiones que espera que este tipo de programas sociales lleven a Bolivia a una etapa superior y que pueda sobreponerse a muchos años de atraso y analfabetismo en su territorio.
Este bono educativo, junto a otros como el Juana Azurduy destinado para las embarazadas y la Renta de la Dignidad que va dirigida a los adultos mayores, se paga en mayor medida gracias a la decisión tomada por el gobierno boliviano en el 2006 de nacionalizar los hidrocarburos y recuperar las empresas estratégicas que pertenecían hasta el momento a empresas extranjeras o eran de carácter privado de nacionales bolivianos. Entre las empresas que destacan en la creación del bono se encuentran Yacimientos Fiscales Petrolíferos Bolivianos, la Corporación Minera de Bolivia y la Empresa Nacional de Comunicaciones.
Bolivia se ha convertido en el segundo país de América Latina que más invierte en educación, solo por detrás de Cuba, con un 14 por ciento del presupuesto del Estado destinado a ese sector. Actualmente, la administración de Morales destina unos 2 mil millones de dólares anuales para ese campo, número se encuentra muy por encima de los 600 millones que se destinaban en el año 2000. Estos proyectos se ubican dentro de la Agenda Patriótica 2025 que consiste en un programa gubernamental que tiene como fin colocar a Bolivia a la cabeza del continente sudamericano en varios indicadores económicos y sociales, para lo cual es indispensable erradicar de manera absoluta o casi absoluta el analfabetismo.
Dentro del campo de la educación, Bolivia ha intentado mejorar también la preparación de los educadores para que sean capaces de trabajar con los niños de tal amera que estos se sientan motivados a continuar sus estudios y culminar una formación profesional. En este aspecto destaca el Programa de Formación Complementaria para Maestros en Ejercicio cumpliendo de esa manera con uno de los principios de la Educación en ese país de formar de manera integral a los educandos.
Según los Reportes Globales de Competitividad que se realizan de manera anual, Finlandia ocupa el primer lugar en países del mundo con el mejor sistema educativo, seguido por Bélgica, Singapur, Barbados, Suiza, Nueva Zelanda, Líbano, Irlanda, Malta y los Países Bajos. En cuanto a América Latina, Ecuador ocupa el primer lugar de la región y el 74 en el mundo en cuanto a educación primaria, seguido de cerca por la propia Bolivia, Argentina, Colombia, Uruguay, Chile, Venezuela, Brasil, Perú y por último Paraguay.
