Boko Haram continúa utilizando mujeres bomba
Boko Haram es un grupo radical islámico que se ha ocupado de sembrar terror para someter a las masas. Desde hace algún tiempo ha utilizado a mujeres kamikaze como bombas humanas ubicadas estratégicamente para su fin de terror. Más de 200 mujeres, entre niñas y adolescentes, han sido protagonistas principales de los actos que han organizado desde que en 2014 comprobaran el poderoso valor simbólico que repercutía utilizarlas. De ese modo lograban ganar la atención de los medios de comunicación y llegar con su mensaje a más personas.
Es lamentable, pero cierto, el empleo de mujeres bomba por parte de Boko Haram, el grupo terrorista de carácter fundamentalista islámico, por demás, extremista, que se encuentra en activo desde 2002 en regiones africanas como Nigeria, Camerún, Chad, Níger y Malí, donde ha querido imponer la ley Sharia a una población dividida entre musulmanes al norte y cristianos al sur.
De 434 atentados suicidas organizados por Boko Haram, el 56 por ciento ha sido protagonizado por mujeres, a la fuerza, con un total de 224 féminas que han sido utilizadas como bombas, principalmente. De esta manera se ha convertido en el primer grupo terrorista en emplear más mujeres que hombres para ejecutar atentados de esa naturaleza. Esta situación se recrudeció cuando en el año 2014 secuestraron a más de 200 niñas en Nigeria, un hecho muy divulgado y con tal relevancia mediática que Boko Haram centró sus tácticas violentas en el uso de mujeres para acaparar la mirada internacional y llegar con el ejemplo de sus atrocidades a las masas.
Durante sus años de insurgencia, los milicianos del grupo extremista han considerado a las mujeres menos importantes que los hombres, y por tanto han creído que es más sencillo que ellas pasen desapercibidas con un cinturón de explosivos al ir cubiertas con un velo. La fachada perfecta para sus barbaries. Una de las características de Boko Haram es su constante innovación. Por tal de sembrar el terror son capaces de innovar y renovar las tácticas que emplean en sus atentados suicidas.
Sin embargo, Boko Haram comenzó a utilizarlas con más énfasis como bombas posterior al conocido secuestro y esclavización masivos que perpetraron en la escuela femenina en Chibok, aldea nigeriana, la región más afectada por la violencia y el hambre. El suceso ocupó titulares, provocó protestas en todo el mundo y una fuerte campaña bajo el nombre “Bring back our girls” que fue respaldada por personas influyentes como la ex primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, pero nada resolvió el asunto y aún mantienen en cautiverio a muchas féminas desde entonces.
Miles de mujeres y niñas han sido secuestradas por Boko Haram. Las entrenan para que como autómatas cometan atentados suicidas; además muchas son empleadas en sus campos como cocineras y esclavas sexuales. Son simplemente, objetos de sus perversiones.
Según reportes preliminares, la violencia de grupo terrorista Boko Haram ha terminado con la vida de más de 20 mil personas y ha provocado que 2,7 millones hayan tenido que huir de sus lugares de origen. A pesar de los avances del Ejército nigeriano, y con apoyo de la comunidad internacional, todavía existen zonas dominadas por la organización radical liderada en la actualidad por Abubakar Shekau.
