Sexo: el Paraíso está en el mar
La compañía mexicana Original Group presenta una novedosa oferta para las personas con deseos exóticos. Un crucero lujoso servirá de hospedaje para aquellos cuya pasión desenfrenada les provoque libertad total y experimentación sexual sin límites. Uno de los aspectos más importantes será no ser señalados gracias al ambiente ideal de la propuesta. Con un costo que está entre los 450 y 4200 euros, los interesados podrán acceder al “crucero del sexo” que tendrá un recorrido por el Mar Mediterráneo y el Adriático.
Pues sí, y para mayor precisión, en el Azamara Quest, el crucero de la compañía mexicana Original Group que brinda a unas 700 personas un paraíso de 8 días, 180 metros de eslora y 25 metros de puntal para quienes anden tras experiencias nuevas, tengan una mente abierta y quieran llevar su sexualidad a un nivel extremo, ya sea entre dos o más personas. Ya seas homo, hetero, bisexual o swinger.
El Mediterráneo y el Adriático serán los mares por donde surque el Azamara Quest, aunque sus escalas parece que no serán el mayor de los atractivos para los pasajeros. El barco está equipado con restaurantes, bares, casinos, sex shops, diferentes salones eróticos y zonas 100 por ciento nudistas. Además, contará con piscinas donde el bañador y los bikinis serán opcionales. Toda una experiencia donde no faltarán las propuestas picantes.
No obstante, no todo valdrá en el viaje. No estará permitido superar ciertos niveles de ruido después de la medianoche. Quedará terminantemente prohibido que la tripulación mantenga relación íntima con los pasajeros. En las zonas públicas y en los restaurantes habrá que ir vestidos. No se permitirá grabar en vídeo o tomar fotografías con tal de salvaguardar la privacidad de los involucrados. Y, la más importante, recalcan, ante una negativa a una proposición sexual no se debe insistir.
Algunas parejas irán solo a pasar un rato especial, otras para mirar o ser observados. Otros, por último, buscarán experimentar con múltiples acompañantes. En cualquier caso, será una expresión que los márgenes que la sociedad y la sexualidad están dispuestos a transgredir.
Se habla mucho de la celebración de fiestas eróticas y no son pocos los que miran estos acontecimientos para enriquecer semejante aspecto de su vida. Pocas veces se da, sin embargo, la posibilidad de utilizar el inmenso espacio de todo un barco para reunir a cientos de personas y dedicarlo a ese fin durante varios días de forma ininterrumpida. La socialización en este contexto se vuelve prácticamente inmediata y aunque no conozcas a nadie y seas introvertido, no tienes de qué preocuparte, la gente se acercará a ti para entablar contacto.
A diferencia de cualquier crucero, las reglas en la vestimenta son muy sencillas: cuanto más excéntrica y barroca sea, mejor. Permanecer vestido es una de las posibilidades, pero una de las opciones más apreciadas es la de del bodypainting.
El objetivo de este crucero es expandir los horizontes sexuales de quienes se embarcan en la aventura. Durante la primera noche, los organizadores dedicarán unas horas para hacer un tour que permita la familiarización de los pasajeros con el entorno, resolver sus dudas y comprender cómo funciona todo. Las fiestas temáticas nocturnas y los juguetes sexuales más extravagantes forman parte de la oferta fundamental de esta celebración de la vida y el sexo.
Durante el periplo se ofrecerán, además, diferentes talleres que van desde el sexo tántrico, al sadomasoquismo. Cada pareja tendrá múltiples opciones para explorar, jugar y ver a dónde le pueden conducir sus fantasías.
Uno de los mayores atractivos del crucero es un espectacular “Play Room”, donde aquellos que lo deseen pueden explotar su propia sexualidad e incluso explorar con los demás, si eso es lo que buscan. En su vídeo promocional destacan también las fiestas de noches sexuales, en las que además llevar ropa solo es “opcional”. Lo recomendable, dicen, es que sean parejas nuevas en el intercambio de parejas y que sean aventureras y abiertas de mente.
Para aquellos a los que les pueda la curiosidad, la compañía organizadora prepara ya otros eventos similares en Europa como un crucero por el Mediterráneo que partirá en abril de 2018 desde Barcelona y visitará localidades como Cap d’Adge, Marsella, Montecarlo, Florencia o Roma.
Ahora bien, si andas ilusionado, o ilusionada, por anotarte, ten en cuenta que los precios varían de los 450 a los 4.200 euros, dependiendo del camarote. Así que tal vez sea el momento de abrir los ojos, poner pies en tierra (literalmente) y si me acepta un consejo, dedíquese a ser buena pareja, compré palomitas de maíz, y acurrúquese en una cobija viendo una peli junto a su chica o chico...y vierta en ella todas sus perversiones.
