Islandia, el pequeño gigante futbolístico
Islandia ya lo había avisado en la Eurocopa de Francia, y acaba de demostrar con una histórica clasificación al Mundial de Rusia 2018, que aquello no era mera casualidad. Con el boleto, Islandia se convirtió también en el país con menos población, participante de un Mundial, luego de la clasificación de Trinidad y Tobago en una ocasión.
Durante la Euro en Francia, el mundo disfrutó del fútbol de un pequeño mata gigantes, como Islandia. El mundo se sorprendió primero cuando empataron con el seleccionado portugués del astro Cristiano Ronaldo, y festejaron como si hubiesen levantado la Copa. Para ellos llegar un logro, pero conseguir puntos era una locura. Pensar, que sus jugadores (de una población de 330 mil habitantes) no se dedican por entero al fútbol, si no que lo comparten con otras profesiones, en fin son casi aficionados, así que sí, tienen mucho que celebrar, ellos y todos los islandeses. En la Euro eliminaron en octavos al seleccionado de Inglaterra, dando la mayor sorpresa de la competición, y ahora por vez primera encabezan su grupo clasificatorio, algo que jamás habían conseguido. En las clasificatorias de 2006 y 2010, Islandia había terminado en el fondo de sus apartados, mientras para 2014, ya se notaban avances, pero quedaba eliminada en el juego de repechaje. Esta vez se lo tomaban más en serio, tanto que dejaron atrás selecciones de mayor recorrido como Croacia, Ucrania o Turquía. Los islandeses han vivido meses de alegría, desde el resultado de la Euro pasada. Ahora, y con razón, la euforia se apoderó de toda la islita del Atlántico Norte.
Con este histórico resultado, Islandia como Federación escala nada más y nada menos que 100 posiciones en el ranking FIFA, ya está incluso entre los 30 mejores equipos del mundo. Todo un exitazo. ¿Cómo ha pasado eso? Pues según reportes, todo se basa en el trabajo a futuro y de infraestructuras deportivas, que hizo la Federación. Puso toda la inversión a que el fútbol llegara masivamente y en condiciones a todas las partes de la Isla. Han tenido que esperar casi 15 años, para ver el resultado, pero ha valido la espera. Lo más importante, es un país tan helado, fue cubrir las canchas, y que los niños pudieran acceder a las mismas todos los días del año, si así quisieran. La inversión en infraestructura para jugar al fútbol aún durante el crudo invierno de Islandia, ha sido parte de la fórmula exitosa. También se invirtió en la formación de entrenadores y técnicos, sobre todo los que trabajaban con los más chicos, para que no hubiese deficiencias desde la base. Un trabajo a futuro, donde hoy ya se recogen los frutos. La llegada al alto mando de la selección de Islandia, de un experimentado DT como Lars Lagerback terminó por darle el cierre perfecto.
