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domingo, 8 de octubre de 2017

Las ventajas del Té negro para adelgazar

Por LisyFa

Sea por razones estéticas o por motivos de salud, perder peso es una obsesión constante en el mundo contemporáneo, especialmente entre las mujeres. Un nuevo estudio, realizado por científicos de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), en Estados Unidos, ha comprobado, por vez primera, que el té negro puede contribuir a la pérdida de peso, y que, por si esto fuera ayudarnos a perder peso y que, adicionalmente, reporta otros beneficios puesto que propicia un cambio en las bacterias que viven en nuestro intestino.

Los resultados del novedoso estudio han sido publicados en la revista European Journal of Nutrition. Para desarrollar sus conclusiones los expertos utilizaron ratones, y demostraron que tanto el té negro como el verde son capaces de alterar la proporción de bacterias intestinales en esos animales. Así, a medida que el porcentaje de las bacterias asociadas con la obesidad disminuyó en ellos, aumentó el de las vinculadas a un menor índice de masa corporal.

Según la revista Muy Interesante, análisis efectuados anteriormente ya habían corroborado que los llamados polifenoles –antioxidantes con varias propiedades y beneficios para la salud del ser humano– propios del té verde eran absorbidos y alteraban el metabolismo energético del hígado. Ahora, con este nuevo estudio norteamericano, han descubierto que los polifenoles del té negro, al ser demasiado grandes para ser absorbidos por el intestino delgado, cumplen la función de estimular el crecimiento de las bacterias intestinales, así como la formación de ácidos grados de cadena corta.

De acuerdo con Susanne Henning, una de las autoras principales del estudio y profesora en el Centro de Nutrición Humana de la UCLA, los resultados parecen sugerir que tanto el té verde como el negro pueden clasificarse dentro de los prebióticos, esas sustancias que inducen el crecimiento de microorganismos favorables para el bienestar de las personas.

Los investigadores repartieron a los ratones en cuatro grupos diferentes, cada uno de los cuales tenía dietas distintas; dos de ellas fueron suplementadas con té verde o té negro. Después de cuatro semanas, el peso de los ratones que habían recibido extracto de té, tanto negro como verde, se redujo a los mismos niveles que aquel grupo de roedores que habían recibido una dieta baja en grasa. Por otro lado, cuando los científicos recogieron muestras de los intestinos para medir su microbiota intestinal –conjunto de microorganismos que conviven en simbiosis con el nuestro– y del tejido hepático, para medir los depósitos de grasa, vieron que en los ratones que habían consumido té había menos bacterias de las asociadas con la obesidad y más de las relacionadas con una masa corporal magra.

Asimismo, solamente los ratones que consumieron extracto de té negro experimentaron el incremento de un tipo de bacteria llamada Pseudobutrivibrio, que serviría para explicar la diferencia entre cómo cambian el metabolismo energético el té negro y el verde.