Merkel aguanta el pulso y los mercados también
Justo cuando los inversores creían que el drama político en Europa había pasado este año, las negociaciones para formar la próxima coalición alemana se han paralizado. Cabría esperar que el debilitamiento de Angela Merkel intranquilizase a los inversores. Pero los últimos años los sucesos políticos que acapararon los titulares han producido muy pocas caídas en el mercado. El malestar político alemán no será una excepción, en especial a la luz de los sólidos fundamentales. La economía alemana registra un impulso considerable y va camino de su mayor tasa de crecimiento desde 2011. Y aunque en la zona euro el crecimiento se va ampliando, la inflación elevada en el Reino Unido probablemente frene el gasto de los consumidores. Es poco probable que el malestar político en Alemania contamine a los mercados.