Las heridas se curan por la noche
Las quemaduras son son una causa importante de muerte accidental, solo superadas por los accidentes de automóviles. Son lesiones producidas por agentes externos que pueden ser físicos, químicos o biológicos y provocan graves daños a la piel. Diversos factores en la actualidad han agudizado el problema asistencial constituido por las quemaduras, dígase de los derivados del petróleo y los múltiples aparatos construidos por la industria contemporánea han introducido en el seno del hogar, fuente principal de estas lesiones, una serie de elementos cuyo manejo encierra múltiples peligros.
Por otra parte, las guerras con el empleo masivo de las armas incendiarias y de las bombas termonucleares, han incorporado una lamentable fuente de quemaduras. Estas representan uno de los accidentes más graves e incapacitantes y constituyen una de las condiciones más devastadoras encontradas en la medicina. Afecta a todas las edades y se estima que alrededor de 9 millones de personas quedan incapacitadas anualmente en el mundo debid a ellas. Estas alteraciones pueden provocar shocks que pueden llevar al paciente a la muerte o dejar secuelas invalidantes, ya que algún miembro puede perder su función y deformantes, pues las cicatrices alteran el color y la forma de la piel.
Pero ahora, investigadores del Reino Unido han descubierto una forma de sanar las quemaduras rápidamente, pues el hecho es que las heridas que ocurren durante el día sanan hasta 11 días más rápido que las que se han producido por la noche, hallazgo médico que puede ayudar al desarrollo de fármacos que ayuden a acelerar la recuperación de los pacientes. Las quemaduras que demoran tanto en sanar, ahora podrán desaparecer más rápido.
El hecho es que el ritmo circadiano tiene un profundo impacto sobre cómo reaccionan las células de la piel, que son las primeras en responder al daño, ello es lo que expone este estudio, publicado en Science Translational Medicine, que muestra cómo estas células, llamadas fibroblastos, transforman su actividad durante las 24 horas del día.
Los expertos indican que esta es la primera vez que se ha demostrado que el reloj circadiano dentro de las células cutáneas determina con qué efectividad responden las células a las lesiones, dice el doctor John O’Neill, del Laboratorio de Biología Molecular del MRC.
El equipo probó esta importante y trascendental teoría en ratones, y así demostraron que las heridas que ocurren durante la fase activa del ritmo circadiano, que para los ratones es confusa durante la noche, fueron mucho más rápidas en la curación. También recurrieron a los registros de pacientes con quemaduras que habían pasado por urgencias y buscaron a ver si había alguna conexión entre cuándo se lesionaron y cuánto tiempo les llevó el curarse.
Las cifras corroboraron los resultados del estudio, pues aquellos que se quemaron por la noche tardaron un promedio de 60 por ciento más de tiempo en sanar que aquellos que se lesionaron durante el día. Las lesiones nocturnas, según los datos analizados, tardaron alrededor de unos 28 días para curarse, mientras que las que se produjeron durante el día, solamente 17.
Los expertos intentaron buscar las razones detrás de esta diferencia, y encontraron que las células de la piel se mueven hacia la lesión más rápido durante el día que por la noche, lo que refleja un comportamiento impulsado por el aumento de la actividad de una proteína llamada actina, conocida por su importante rol en el movimiento y la reparación de las células.
Este descubrimiento, como ya vemos, podría tener algunas aplicaciones bastante increíbles en medicina al reducir drásticamente los tiempos de recuperación, además, es posible que el tiempo de cicatrización se mejore reiniciando los llamados relojes de las células antes de la cirugía, mediante la aplicación de medicamentos que puedan restablecer el reloj biológico al momento de la mejor curación en el sitio de la operación, refiere el doctor O’Neill.
