Ansiedad, la pandemia silenciosa
Es normal preocuparse. De hecho, los estudios sugieren que cierto estrés podría ser bueno para usted. Pero, ¿cuándo se vuelve preocupante la preocupación? Un nuevo estudio publicado en Depression and Anxiety sugiere que el 90 por ciento de las personas que sufren de ansiedad o depresión no reciben el tratamiento adecuado. Eso es un gran problema, considerando que 1 de cada 10 personas sufre de ansiedad y de esas solo el 9.8 por ciento recibe el tratamiento apropiado.
Es porque la mayoría de las personas no saben que necesitan ayuda. Un poco más del 40 por ciento de las personas que sufren de ansiedad o depresión reconocen la necesidad de tratamiento, y cuando la ansiedad no se combina con otro trastorno, esa cifra baja a 26.3 por ciento. El tratamiento para la ansiedad y la depresión también es costoso. Un estudio sugiere que el costo anual del tratamiento es más de 7 400 dólares, y ese número aumenta si la ansiedad se combina con depresión u otros síntomas de dolor.
Para algunos, también existe un estigma percibido que acompaña a la búsqueda de atención de salud mental. Tres de cada cuatro personas que padecen enfermedades mentales informan que están avergonzadas o no quieren ser estereotipadas, con sentimientos de vergüenza, culpa y desesperanza. Encargado por World Mental Health, el estudio internacional describió la brecha de tratamiento en los trastornos de ansiedad a nivel internacional por primera vez. Los investigadores examinaron la adecuación del tratamiento del trastorno de ansiedad en todo el mundo a partir de una muestra de 51 500 personas de 21 países diferentes.
En los países de altos ingresos, solo un tercio de los trastornos de ansiedad reciben tratamiento, excepto en los Estados Unidos, donde las tasas de atención son más altas. Ese número varía según los países; la ansiedad afecta al 5.3 por ciento de las personas en los países africanos, pero ese número casi se duplica en los europeos (10.4 por ciento). Algunos trastornos, como las fobias o la ansiedad por separación, comienzan más temprano en la vida a la edad de 5 a 10, mientras que el trastorno de ansiedad generalizada, el trastorno de pánico o los trastornos de estrés postraumático tienden a aparecer entre los 24 y los 50 años.
En 2010, la ansiedad y la depresión costaron a 30 países de la Unión Europea un estimado de 74,400 millones de euros. "La alfabetización y la conciencia sanitaria deben promoverse en aquellos países donde no se reconoce la necesidad, generalmente en países de ingresos medios y / o bajos", dijo la investigadora Jodi Alonso en un comunicado. "Es importante alentar a los proveedores de atención médica a seguir las pautas clínicas para mejorar la calidad del tratamiento cuando se trata de trastornos de ansiedad".
¿Cuándo debe buscar ayuda para la ansiedad o la depresión? Los expertos dicen que tan pronto como comienza a afectar aspectos de su vida como la salud física, el trabajo, las relaciones, las drogas, el consumo de alcohol o la calidad de vida.