Los finalistas de Kiev tienen muchas lagunas
El Liverpool de Jürgen Klopp, pese a una derrota en Roma, frente a la Loba de cuatro goles a dos, pasó a la final de la Champions League, para disputar la orejona en Kiev, frente al club español Real Madrid. Pero ninguno de los dos clubes desplegó un buen fútbol para ello. Ambos mostraron dos caras durante el choque, y la final puede no ser muy vistosa.
La Roma ganó en Italia, pero el clasificado fue el Liverpool. Los ingleses no dejaron perder la ventaja que sacaron en Anfield, aunque por la mínima, solo un gol faltó para el alargue. No cometieron el mismo error del Barcelona, pero cometieron otros. Tanto, que terminaron pidiendo la hora, y a un gol del tiempo extra. Esta vez el egipcio Salah, no pudo aportar al equipo, pero Mané hizo andar la fiesta inglesa. El equipo de Jürgen Klopp, fue uno durante los primeros 45 minutos, y otro muy distinto durante la segunda mitad. Si ese de la segunda mitad es el equipo que juega en Anfield, pues el Madrid levantará fácil la orejona número 13 de su historia. Aunque queda claro, que el club español es favorito. Ambos juegan parecido, aprovechan los descuidos del rival, y en pocos pases te arman un contraataque y anotan, por demás con el tridente ofensivo más letal de Europa en la actualidad. El Madrid como el Liverpool también cometió errores tontos, y el arbitraje, tanto en Madrid, como en Roma, tuvo sus graves desaciertos. Cosas de humanos, se supone, más el nerviosismo de la gran responsabilidad que tienen quienes imponen el orden en la cancha.
Pero en un final los dos equipos, han dado muy poco que desear, mucho mejor el Madrid, aunque con fallas en la defensa, salvadas literalmente por un portero del nivel de Keylor Navas. El Bayern le pasó por encima en los numeritos, pero el Madrid fue letal en sus pocas oportunidades. Al igual que el club blanco, los de la ciudad de los Beatles, se equivocaron mucho en la defensa, tanto que el primer gol de la Roma, vino por un despeje que rebotó en la cara de un defensa, y entró en la propia meta. El portero, por cierto, totalmente desajustado, en ello, el Madrid es muy superior de cara a Kiev. Es superior en todo, excepto en al delantera. Ahí está el karma del Madrid, que se vistió de gala, en el único día de la temporada que Karim Benzemá despertó de su letargo. No creo que una noche como esta se le vuelva a repetir al francés, porque está muy lejos de ser lo que fue, pero una noche suertuda la tiene cualquiera. El Gato la tuvo en Madrid. El equipo de Klopp está invicto en 14 juegos de la Liga de Campeones esta temporada y el equipo que más puntos anotó en la competencia con 40 goles. Llegará invicto a Kiev, pero perder la última batalla, por errores como los visto en Roma, sería lamentable. Roberto Firmino, Sadio Mané y el ex favorito de Roma Mohamed Salah son la carta de triunfo, pero no lo pueden hacer todo.
