Serena Williams, ¿penalizada o no en Wimbledon?
La tenista multicampeona de Estados Unidos, Serena Williams, ha vuelto exitosa de su maternidad, pero se le castiga por ello, cuando en Wimbledon se piensa que no debería quedar marcada por su ausencia maternal de las canchas. El “All England Club” debe hacer lo correcto o arriesgarse a que lo miren por castigar a una estrella por tener un bebé.
El “All England Club” está decidiendo si ofrecerle a la número 449 del ranking de tenis actual, pero siete veces campeona de Wimbledon, Serena Williams, una siembra en el famoso torneo inglés de Wimbledon. El examen está dado por el lugar de Serena, pero hasta en otro planeta, sabrían que la norteamericana está en ese sitio, por una simple razón, no compite desde que dio a luz. Por ello, hay algunas buenas razones por las que Wimbledon debería romper con la tradición y ofrecer a una jugadora clasificada en el puesto 449 del mundo una siembra en el campeonato de este año. La principal es el hecho de que ha ganado siete títulos allí y se llama Serena Williams. Dado el estado del flujo en el juego femenino, la mejor jugadora de la era moderna podría ser el peor rival en un probable sorteo. Nadie en el top 32 disfrutaría enfrentarla en la primera ronda si llegara a quedar fuera de las sembradas. Dicho eso, su regreso a los 36 años aún no se ha acelerado, acumula solo cuatro apariciones desde que regresó cautelosamente a la gira este año después de un parto difícil en septiembre. No la ha tenido fácil, pero tampoco lo tendrían sus contrincantes.
Serena todavía está buscando su estado físico más adecuado, después de las primeras derrotas en Indian Wells y Miami, por lo que las cosas podrían complicarse antes del día de la inauguración en Wimbledon el 2 de julio. Aunque Williams se ha perdido casi de vista en los rankings después de su larga ausencia en 2017, sigue siendo la dueña de 23 títulos de grand slam, la ex número uno del mundo tiene una clasificación protegida para entrar en las mayores. Sin embargo, cuando se le preguntó a los mandamases del All England Club, dijeron primero que la regla era ambigua, aunque en los sembrados masculinos sí se ajustaron a la misma, y Andy Murray quedó fuera de los 32 sembrados. La parte femenina dejó la puerta entreabierta, con toda intención. Wimbledon sí quisiera la siembra de Serena, pero ¿quién no? Las probabilidades son que harán lo correcto. Usualmente lo hacen. Ese es el instinto que impulsa este tradicional evento del tenis, durante los 150 años de su existencia. Wimbledon se ha librado de dicha controversia con total facilidad. Será una prueba de su clase y sabiduría cuando el comité de siembras se reúna el 26 de junio. Serena, la jugadora más espectacular de esta era, se ha ganado el derecho de ser considerada especial.
